El Audi SQ8 nació en 2019 como TDI, con 455 CV, pero desde finales del año pasado su motor diésel dio paso a un V8 4.0 de gasolina que ofrece, de serie, 507 CV (373 kW) y un par máximo de 770 Nm, cifras con las que hace el 0-100 km/h en 4,1 segundos. Tras pasar por las manos de ABT y simplemente a base de electrónica, el motor TFSI entrega nada menos que 650 CV (478 kW) y 850 Nm. Semejante potencia le permite alcanzar los 100 km/h desde parado en 3,8 segundos, mientras que la velocidad máxima pasa de 250 a 270 km/h, limitada en ambos casos por la correspondiente centralita.
Qué preparación incluye el Audi SQ8 de ABT
La preparación puede complementarse con el Aero Package, que incluye faldones delantero y trasero y un alerón. ABT recomienda también instalar sus llantas de 23 pulgadas, disponibles en negro mate o brillante.
El conjunto de incremento de potencia, Aero Package y llantas se ofrece, en Alemania, por 22.900 euros, más 3.445 euros en concepto de instalación y pintura. Y si por el contrario quieres hacerte con un Audi SQ8 ABT completo, deberás preparar 130.795 euros. Hay que tener en cuenta que, en Alemania, el Audi SQ8 se vende desde 103.700 euros, mientras que la superior carga impositiva hace que en España cueste 123.120 euros.
Más potente que el Audi RSQ8
Con semejante aumento de potencia, la comparación con el RSQ8 está servida. El modelo más potente de la gama ofrece, de fábrica, 600 CV y 800 Nm, y se vende en Alemania por 129.500 euros, si bien en España su precio se eleva en algo más de 30.000 euros.
Ahora bien, a pesar de declarar 50 CV menos y 50 Nm menos que el SQ8 de ABT, el RSQ8 calca sus cifras de aceleración y, opcionalmente, puede registrar una velocidad máxima de hasta 305 km/h. Para ello, eso sí, hay que montar el Paquete Dynamic RS plus, que incluye el diferencial trasero activo, las estabilizadoras activas y los frenos cerámicos, y cuyo precio, en España, ronda los 18.000 euros.