Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.
Durante la cumbre One Planet auspiciada por el Presidente de la República Francesa Emmanuel Macron para impulsar los compromisos aceptados por los países firmantes del pacto de París por el clima de 2015, y que tiene lugar estos días también en París, el Presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, ha anunciado la retirada de las subvenciones y ayudas financieras hasta ahora destinadas a los proyectos relacionados con la prospección y extracción de los combustibles fósiles, más de 71.000 millones de dólares al año.Esta situación que aún se va a prolongar un año más por los compromisos preestablecidos, sostenía la mayor paradoja de las políticas internacionales para la reducción de emisiones contaminantes encaminadas a detener el cambio climático.El capital del Banco Mundial cuya misión está destinada a acelerar el desarrollo sostenible en el mundo se empleaba hasta ahora para sostener artificialmente la economía de los combustibles fósiles. Una inyección continua de dinero público que facilita la rentabilidad de las inversiones privadas en una actividad que hemos convenido perjudicial para las personas y para la vida en el Planeta.Esta decisión explícita de Jim Yong Kim supone un antes y un después en el orden económico mundial que aún pivota principalmente sobre los combustibles fósiles."Trabajamos con nuestros socios para poner en marcha las políticas correctas, para encaminar las fuerzas del mercado en la dirección correcta, para poner sobre la mesa el capital necesario para hacerlo posible y así acelerar las acciones que nos dirijan hacia la protección del clima y de la vida en la Tierra". Ha añadido Jim Yong Kim en una cumbre en la que participan más de 2000 expertos del entorno financiero y científico y los máximos representantes políticos de más de 50 países.Hasta ahora ya podíamos aventurar que en un futuro, aún indefinido, la generación renovable de energía sustituiría la práctica totalidad de las necesidades energéticas que actualmente satisfacemos mediante la quema masiva de combustibles fósiles, incluido el transporte de personas y mercancías por carretera.Con la retirada de fondos del Banco Mundial para el sostenimiento de las actividades de la explotación de los combustibles fósiles, el efecto dominó se ha activado, y ya se van sumando una buena parte de los principales actores de la inversión global, incluido el Banco de China, también representado en la cumbre.Por estas circunstancias y porque bien sabemos que el “poderoso caballero” se llama “don dinero", ahora ya sin temor a equivocarnos podemos afirmar que estamos asistiendo al principio del fin de la era del petróleo.