Mille Miglia 2019: los clásicos ponen rumbo a Bolonia
La edición número 37 de la Mille Miglia se dirige a Bolonia para afrontar su recta final. Los 430 clásicos participantes, la mayoría veteranos de esta carrera, llegarán a la meta en Brescia mañana, día 18 de mayo.
Un año más, la Mille Miglia ha reunido a los amantes de los clásicos de todo el planeta. En esta ocasión, participan 430 equipos de 40 países para congregar un total de 75 fabricantes de automóviles. Cabe recordar que todos los coches clásicos que participan en este evento ya han tomado la salida en alguna de las ediciones originales de la Mille Miglia, es decir, entre 1927 y 1957, cuando el accidente sufrido por Alfonso de Portago al volante de un Ferrari 355 S puso punto y final a la prueba; o bien, han obtenido el beneplácito de la dirección de la carrera para poder inscribirse.
Décadas más tarde, concretamente en 1977, la Mille Miglia renació como una carrera de regularidad para coches clásicos en la que solo podían participar las unidades inscritas en la carrera original. La ruta es similar a la de la prueba que se celebró entre los años 20 y los años 50: Brescia-Roma-Brescia.
En esta ocasión, el evento consta de cuatro etapas, la primera de Bresca a Cervia-Milano Marittima, la segunda de Cervia-Milano Marittima a Roma, la tercera, que se celebra hoy, de Roma a Bolonia y, como colofón final, mañana sábado 18 de mayo, los 430 clásicos participantes recorrerán la distancia que separa a Bolonia de Brescia, donde tendrá lugar el final de la carrera.
Así va la clasificación
A las 6:30 de la mañana, los participantes han abandonado Roma según su posición en la clasificación; el primero en salir ha sido el Alfa Romeo 6C 1750 SS Zagato de 1929 del equipo Villa Tasqua, formado por Andrea Vesco y Andrea Guerini; en segundo lugar, ha tomado la salida el Alfa Romeo 6C 1500 SS de 1928 del equipo Alfa Romeo, formado por Giovanni Moceri y Daniele Bonetti, y los terceros en salir de roma con rumbo a Bolonia han sido Juan Tonconogy y Barbara Ruffini, al volante de un Bugatti Type 40 de 1927.
Como te contamos antes de que diera comienzo esta edición, además de la pasión por los coches clásicos, la Mille Miglia combina el arte con la belleza, el diseño y la historia. Y es que esta carrera involucra de lleno a las ciudades, los pueblos, las calles, las plazas y las carreteras por donde pasa; en definitiva, es un espectáculo único en un territorio conocido por la belleza de sus parajes naturales como es Italia.
