Peugeot Partner y Citroën Berlingo Van 2018: ¿en qué se diferencian?

Pablo García
Pablo García
Citroën y Peugeot ponen a la venta las versiones comerciales del Berlingo y el Rifter. En Citroën añaden el apellido Van –Berlingo Van– y en Peugeot conservan el nombre de la anterior generación –Partner–. Si andas buscando un vehículo para trabajar, práctico y con un buen nivel de equipamiento no te pierdas todos los detalles.


Como sucedía en la anterior generación, tanto el Citroën Berlingo como el Peugeot Partner son en esencia el mismo coche. Sin embargo, cada uno de ellos tiene sus rasgos diferenciadores que les aportan cierta exclusividad. Y es que aunque en la actualidad son casi idénticos –también lo es ahora el Opel Combo–, Citroën lleva desde 1928 en el mercado de los comerciales ligeros, año en el que llegó el C4 Van. Le siguió el 2CV Mini-Van, en 1951, y el Acadiane, en 1978 –ambos derivaban del 2CV y el Dyane–. A pesar de estos antecedentes, el éxito definitivo de la marca en el segmento llegó con la comercialización del Citroën C15, lanzado en 1984. Estuvo a la venta 21 años y en total se fabricaron casi 1,2 millones de unidades. En 1996 llegó la primera generación del Berlingo y con ella su primo hermano, el Peugeot Partner. Desde ese momento ambas furgonetas han compartido mercado. La segunda generación de ambas vería la luz en 2008. Y ahora en 2018 damos la bienvenida  a la tercera generación.

Cómo son por fuera

Respecto a las versiones de pasajeros –en el caso del Peugeot ha sido rebautizada como Peugeot Rifter–, ambos modelos sufren cambios. Por ejemplo, los paragolpes van sin pintar –aunque también pueden ir pintados al igual que las molduras laterales y la carcasa de los retrovisores– para ´soportar´ mejor el uso en ciudad. Además, en el caso del Berlingo Van pierde el faro a doble altura por unos de diseño clásico que integran todas las funciones.

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

En la parte trasera de ambos modelos encontramos puertas de doble hoja, con una apertura que puede llegar hasta los 180º. Debido al uso de estas puertas, los pilotos traseros de ambos modelos tienen un diseño diferente a las de las versiones de pasajeros, con un tamaño más pequeño. En la parte lateral existe una práctica puerta corredera. De manera opcional podemos montar una puerta a cada lado del vehículo.

Cómo están estructuradas las gamas

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

Ambos modelos están disponibles con dos tamaños de carrocería. La corta mide 4,40 metros de largo y en su interior podemos cargar dos europalets, ya que tiene un volumen de hasta 3,80 m3. Por su parte, la versión larga se extiende hasta los 4,75 metros de largo, consiguiendo un volumen máximo de 4,40 m3. La carga máxima que podemos transportar en función del modelo y la carrocería va desde los 650 hasta los 1.000 kilos.

Con ambas carrocerías podemos elegir diferentes variantes: furgón, furgón mixto acristalado, furgón acristalado o pickup. Por ahora no existe una versión con techo sobreelevado. En cuanto a la zona de pasajeros, en función de la configuración podemos albergar de 2 a 3 pasajeros en una sola fila de asientos mediante una banqueta corrida. Y si contamos con una segunda fila de asientos podremos llevar hasta a 5 ocupantes.

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

En el caso del Berlingo la versión furgón puede tener dos versiones: Worker y Driver. La Worker es la que se destina al trabajo duro con unos neumáticos M+S, una carga útil de 1.000 kilos y una distancia al suelo elevada. En el caso de la variante Driver, su destino está más orientado a ofrecer comodidad a sus pasajeros. En ella encontramos un equipamiento más completo y una mejor insonorización. Como curiosidad, ambos modelos disponen de un sensor que mide el peso de la carga y, si se sobrepasa, avisa al conductor para evitar costosas multas por exceso de peso.

Dentro de las transformaciones disponibles podemos encontrar versiones ambulancia, vehículos taller, de reparto de mercancías, de transporte para personas con movilidad reducida e isotermos. Además ambos modelos se podrán elegir con tracción total a las cuatro ruedas con sobreelevación de la carrocería y protecciones en los bajos gracias a la preparación realizada por el especialista francés Dangel.

Cómo son sus gamas de motores

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

Tanto el Berlingo Van como el Peugeot Partner están disponibles con motores diésel y gasolina. Los motores diésel proceden de un mismo bloque 1.5 BlueHDI de cuatro cilindros con 75, 100 y 130 CV; en gasolina la oferta mecánica la forma un único motor 1.2 PureTech de tres cilindros con turbo de 110 y 130 CV. Todas las cajas de cambios son manuales de cinco o seis velocidades en función de la motorización elegida. En opción, y sólo para las motorizaciones de 130 CV, podemos elegir una caja de cambios automática mediante convertidor de par de ocho velocidades denominada EAT8 con un muy buen funcionamiento tanto por suavidad como por velocidad de cambio.

Cómo van en marcha

Tanto el Berlingo Van como el Peugeot Partner estrenan nueva plataforma. Se trata de la EMP2, que también encontramos en los Peugeot 308, 3008, 5008, Citroën SpaceTourer u Opel Grandland X. Eso sí, esta plataforma sufre una serie de modificaciones en el tren trasero para adaptarse a la posibilidades de carga de estos vehículos. Con esta nueva plataforma, el comportamiento de estos modelos da un paso de gigante respecto a sus antecesores en cuanto a calidad de rodadura, guiado del tren delantero y ligereza del conjunto.

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

Los motores que hemos podido probar durante la presentación han sido el diésel de 100 CV y el gasolina de 110 CV. Ambos motores encajan perfectamente con el tipo de vehículo, ya que resultan muy agradables por respuesta, principalmente a bajas vueltas y consumo –en condiciones normales de uso, el gasolina gasta en torno a un litro más que el diésel–. Eso sí, si pretendemos circular cargados por carretera es preferible optar por las versiones de 130 CV. Para adaptarse a los nuevos ciclos de homologación, las versiones diésel equipan filtro antipartículas y un sistema de reducción catalítica selectiva mediante el empleo de AdBlue.

En temas de estabilidad y comportamiento no se aprecian diferencias entre un modelo y otro. Tan sólo cabe destacar la particularidad de la postura de conducción del Partner con el i-Cockpit, donde la instrumentación va más elevada que en el Berlingo Van y el volante resulta más pequeño. Es algo que antes de decidirnos por un modelo o por otro debemos probar, ya que a la hora de abordar una carretera de curvas el volante del Partner puede resultar una ventaja o un punto en contra en función de nuestro estilo de conducción.

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

Estás versiones ´comerciales´ van menos aisladas acústicamente que las versiones de pasajeros, algo que se deja notar cuanto por ejemplo circulamos a alta velocidad.

Para mejorar la visibilidad de la parte trasera, las versiones paneladas que no disponen de espejo retrovisor, incorporan una pantalla de 5″ instalada en la luna delantera. Esta pantalla va conectada a un sistema de cámaras que hacen las funciones de retrovisor denominado Surround Rear Vision. Además de la función de espejo retrovisor, cuando insertamos la marcha atrás cambia la perspectiva para ver todo los que sucede en la zona de paragolpes y así evitar pequeños golpes. Otra de las funciones es una vista lateral del vehículo que elimina el ángulo muerto que lo consigue con una cámara colocada en el retrovisor derecho –en el izquierdo para las versiones con volante a la derecha–. Para cambiar la vista tenemos un botón colocado en el mando de los intermitentes.

Cómo son sus equipamientos

Comparativa Citroën Berlingo y Peugeot Partner

Tanto el Berlingo Van como el Partner dan un salto tecnológico importante en cuanto a nivel de equipamiento. Se pueden equipar con una pantalla táctil de 8″ con muy buena resolución para manejar todo el sistema de infoentretenimiento, siendo compatible con Android Auto, CarPlay y Mirror Link. También pueden llevar control de velocidad adaptativo, reconocimiento de señales de tráfico, aviso de salida involuntaria de carril, freno de mano eléctrico, acceso y arranque manos libres, cargador de móvil por inducción, sensor de lluvia y luces, luces largas automáticas, acceso de arranque manos libres y head up display, entre otros elementos.

Además, dentro de la zona de la cabina existen numerosos huecos portaobjetos. En el caso de elegir la configuración de tres plazas, el asiento central se puede plegar para transformarlo en una práctica mesa orientable.

Ambos modelos, junto con su hermano el Opel Combo, han recibido el galardón internacional Van of the Year 2018 y se fabrican en la factoría de PSA en Vigo. El Citroën Berlingo Van arranca en 13.739 euros + IVA (1.124 euros adicionales + IVA para la versión XL). En el caso del Peugeot Partner la gama empieza en 14.087 euros+ IVA (1.289 euros más + IVA para la versión Long).

 

Peugeot Partner