Trabajó un tiempo para Google y hasta Elon Musk ha intentado ficharle, pero George Hotz, un joven hacker de San Francisco prefiere ser su propio jefe e intentar disparar su cuenta bancaria personal con su propia empresa tecnológica, ‘Comma.ai’. Su talento es de sobra conocido pues con 18 años fue el primero de la historia en conseguir desbloquear un iPhone y un año después fue capaz de piratear la PlayStation 3. Ahora, y desde el garaje de su casa en San Francisco, su objetivo es pasar por encima de los grandes fabricantes automovilísticos que pretenden liderar la carrera en el desarrollo del coche autónomo.
Para conseguir este ambicioso objetivo, Hotz tiene ya muy avanzado un software que pondrá a la venta por apenas 24 dólares al mes y podrá convertir cualquier coche normal en un coche autónomo con la simple ayuda de un teléfono móvil conectado al propio coche. «Algunas empresas creen que van a dominar el mercado de los coches autónomos, pero nuestra empresa (Comma) va a crear el mejor software de conducción autónoma y luego lo venderemos por 24 dólares al mes», explica Hotz, CEO de ‘Comma.ai’.
Según explica Hotz, el desarrollo de su software de conducción autónoma depende, en gran medida, de la economía colaborativa, ya que es necesaria la ayuda de otros conductores para subir información al servidor. A través de la app móvil que ha desarrollado, los conductores deben colocar su teléfono móvil en un soporte en la luna delantera, intentando que la cámara del teléfono pueda grabar correctamente lo que ocurre delante del coche. Una vez el coche alcance los 16 km/H, el teléfono comienza a grabar los diferentes recorridos y, una vez se concluya la conducción, esa información se registra en un servidor común al que todos los usuarios de Comma.ai pueden tener acceso.
Para que el software sea efectivo, Hotz quiere lograr antes una información de 16 millones de kilómetros y, a partir de ahí, crear una serie de kits de conducción autónoma en los que estarán registrados comportamientos habituales de los conductores para una conducción autónoma segura.