Cómo comprar un coche eléctrico de segunda mano y no ser estafado en el intento

El mercado del coche eléctrico ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, tanto en la venta de nuevos modelos como en el ámbito de los coches de segunda mano. Este aumento en la demanda ha hecho que muchos conductores se interesen en adquirir un vehículo propulsado por electricidad usado, atraídos por la posibilidad de obtener tecnología avanzada y beneficios ambientales a un precio reducido.

Sin embargo, este auge también ha traído consigo una serie de riesgos y posibles fraudes. Según Matas Buzelis, experto de la empresa de datos de automoción carVertical, uno de los principales engaños que deben evitar los compradores es la manipulación del kilometraje del coche eléctrico, una práctica que oculta el verdadero estado de la batería y aumenta artificialmente el valor del vehículo.

En caso de que te encuentres sumergido en el complejo mercado del coche eléctrico de segunda mano, desde Autofácil te echamos un cable para que salves las estafas y que tu próxima compra no te salga rana.

1. Investiga los modelos disponibles en el mercado del coche eléctrico usado

El primer paso para evitar ser víctima de una estafa es realizar una investigación exhaustiva sobre los modelos de coche eléctrico disponibles en el mercado de segunda mano. Los Tesla, especialmente los Model 3 y Model S, dominan este mercado debido a su popularidad, valor residual y características tecnológicas avanzadas.  

Al optar por un modelo popular y reconocido, los compradores no solo aseguran una buena reventa futura, sino que también tienen acceso a una mayor cantidad de información y opiniones de otros usuarios que pueden ayudar a identificar posibles problemas o estafas comunes.

Según datos de carVertical, el Tesla Model 3 es el coche eléctrico más comprobado en su plataforma, representando el 16,1 % de todas las verificaciones de coche eléctrico, seguido por el Model S con un 11,84 %, el Nissan Leaf con un 11,83 %, el Audi e-tron con un 9,8 % y el Volkswagen Golf con un 9,5 %.

2. Verifica el estado de la batería y el kilometraje

Uno de los aspectos más críticos al comprar un coche eléctrico usado es la verificación del kilometraje. La batería es el componente más caro y esencial en este tipo de vehículos, y su estado está directamente relacionado con el kilometraje del coche. Los fabricantes suelen ofrecer garantías de 8 a 10 años o hasta 160.000 kilómetros para las baterías.

Sin embargo, el desgaste puede variar significativamente dependiendo de cómo se haya cargado el coche: cargar frecuentemente en estaciones de carga rápida puede acelerar el deterioro de la batería, mientras que cargar lentamente hasta un 80 % es lo recomendado para prolongar su vida útil.

Buzelis advierte que algunos vendedores deshonestos alteran el kilometraje del coche para ocultar el verdadero estado de la batería. Según datos de carVertical, el 2,6 % de los coches eléctricos comprobados en su plataforma tenían el kilometraje alterado, lo que subraya la importancia de realizar una verificación exhaustiva. Los compradores deben solicitar un informe detallado del historial del vehículo, incluyendo datos sobre el kilometraje, historial de servicio y cualquier accidente previo.

2. Evalúa la depreciación y el valor residual del coche eléctrico

Los vehículos eléctricos más costosos tienden a depreciarse más rápido que los modelos de combustión interna, lo cual puede ser una ventaja para los compradores de segunda mano. Un coche eléctrico que ya ha perdido una parte significativa de su valor original puede ofrecer una excelente relación calidad-precio. Sin embargo, es crucial evaluar correctamente la depreciación y el valor residual del coche.

El Tesla Model 3, por ejemplo, es conocido por mantener bien su valor en el mercado de segunda mano, lo que lo convierte en una opción atractiva. «Tesla tiene una imagen sólida en el mercado de coches eléctricos, y muchos conductores los desean. Estos coches ofrecen una gran combinación de seguridad y tecnología, así como una gran autonomía con una carga completa. Lo más importante es que son buenos para mantener su valor residual. Un Model 3 de segunda mano es una muy buena opción, aunque no es el más barato», explica Buzelis.

3. Ten en cuenta el coste del mantenimiento y reparaciones

Contrario a lo que muchos piensan, el mantenimiento de un coche eléctrico puede ser menos costoso que el de un coche con motor de combustión interna debido a su construcción más simple y menos partes móviles. Sin embargo, las reparaciones pueden ser significativamente más caras, especialmente si el vehículo ha sufrido un accidente grave.

Según datos de carVertical, los vehículos eléctricos presentan el valor medio de daños más alto en comparación con otros tipos de coches: 7.023 euros, frente a 6.793 euros para los híbridos, 5.957 euros para los de gasolina y 4.256 euros para los diésel.

A pesar de estos costos, los coches eléctricos se ven involucrados con menos frecuencia en accidentes graves. De acuerdo con las estadísticas, sólo el 35,4 % de los vehículos eléctricos comprobados habían sufrido daños, en comparación con el 45 % de los híbridos, el 49,1 % de los de gasolina y el 46 % de los diésel. Esto puede deberse en parte a la menor prevalencia de vehículos eléctricos en el mercado y su edad media más joven.

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