El Campeonato del Mundo de Rallyes 2023 se va a acercando a su fin. Tras este Rally Acrópolis 2023, ya sólo tres pruebas más. Y, tras la victoria de Rovanperá y Halttunen con su Toyota GR Yaris Rally1, la tercera del año, sólo su compañero de equipo Elfyn Evans y el piloto de Hyundai Thierry Neuville podrían quitarle su segundo título al bueno de Kalle. Sin embargo, su ventaja es grande. Y, en función de lo que ocurra en Chile, podría ser incluso allí campeón del mundo…
Centrándonos en el rally, y tras las fuertes lluvias de esta semana pasada en Grecia, los pilotos afrontaban un recorrido acortado y muy duro por lo roto del terreno y las grandes roderas que se iban formando a su paso en unos tramos que, ya de por sí, son muy duros.
Neuville y su Hyundai i20 N Rally1 se mostraban muy fuertes en la primera jornada, y se iba a dormir líder el viernes con Sebastien Oiger, de Toyota, a menos de tres segundos. Rovanperä marchaba tercero a 25 segundos, sin querer arriesgar en unos tramos en los que era muy fácil pinchar o romper algo. Por detrás, Evans trataba de no perder la estela de Kalle, lo mismo que Esapekka Lappi con el segundo Hyundai.
Justo detrás, Takamoto Katsuta (Toyota) y Dani Sordo (Hyundai) se quedaban más descolgados, pues no terminaban de encontrar el ritmo. Por su parte, en Ford la debacle volvía a ser de las grandes: Loubet no llegaba ni a salir al primer tramo del viernes por una grave avería en su Puma, y Tanak hacía lo que podía con un coche que no parece estar ya a la altura de sus rivales en prestaciones y que, encima, penalizaba 3:40 cuando tras el tercer tramo sufría una avería en la bomba de agua y penalizaba tratando de repararla.
El sábado fue el día de los problemas. En el cuarto tramo del día, Neuville, claro líder hasta el momento, rompía la dirección del Hyundai en una zona muy rota del tramo, y Ogier dañaba también la suspensión y también tenía que abandonar la etapa. Rovanperä se encontraba líder casi sin darse cuenta con Dani Sordo en segunda posición tras una jornada en la que fue remontando aprovechando los fallos de los demás.
Elfyn Evans también sufría problemas en el noveno tramo y se colocaba tercero muy cerda de Dani, mientras que Tanak conseguía ascender a la cuarta plaza de la general tras los problemas de Lappi, que había pinchado tras encontrarse una gran piedra en la trazada de plena curva, y de Katsuta, que también tenía que cambiar dos ruedas.
En los tres tramos de la jornada del domingo, la única duda era saber si Sordo podría aguantar a Evans. Pero Dani perdía demasiado en el primer tramo y aunque en el segundo volvía a recuperar terreno, en el tercero Evans volvía a imponerse al español, llevándose la segunda plaza por sólo 4,2 segundos de ventaja sobre un Dani que lo dio todo con un coche en el que tardó en encontrarse a gusto con los reglajes.
Rovanperä, además de llevarse una clara victoria, se llevaba también los cinco puntos por ser el más rápido en el último tramo, dejando detrás a Evans tanto en esa especial como en la general. Neuville, en un rally para olvidar, no conseguía llevarse ni siquiera un punto en el último tramo, una circunstancia que le deja con muy pocas opciones ya al título.
En la categoría WRC2, el más rápido fue Andreas Mikkelsen con su Skoda, que se impuso tras una gran remontada en la jornada del sábado que le llevó a recuperar todo lo perdido en los tres pinchazos que sufrió el viernes. La segunda plaza fue para el Skoda de Gus Greensmitth, mientras que la tercera fue para el Citroën de Yohan Rossel. El español Alejandro Cachón (Citroën), que salía con la única intención de aprender y acabar, finalizaba en décima posición, en una actuación quizá un poco menos espectacular de otras anteriores.
En la categoría Junior, el único representante español era Roberto Blach que, copilotado por Mauro Barreiro, terminaba finalmente en cuarta posición con su Ford Fiesta Rally3.