¿Estás pensando en comprar una furgoneta de segunda mano? Estos consejos te pueden ser útiles

Javier Jiménez
Javier Jiménez
Al igual que sucede con cualquier otro vehículo de segunda mano, conviene realizar una serie de comprobaciones antes de comprar una furgoneta. Tomar una decisión correcta no solo te permitirá ahorrar dinero en el momento de la compra, sino que también ayudará a evitar futuros imprevistos.

A pesar de tener un precio inferior al de un modelo recién salido de fábrica, comprar una furgoneta de segunda mano continúa siendo una importante inversión de dinero para cualquier profesional. Por ello, es necesario tener claro una serie de detalles antes de dar el paso. En primer lugar, que sea válida para la carga, es decir, que cuente con una carrocería cerrada pensada para este fin y con un tamaño compacto, sobre todo, si va a circular por el núcleo de la ciudad.

El primer paso a la hora de comenzar una búsqueda pasa por encontrar una empresa especializada que ofrezca todas las garantías. En este sentido, la opción más recomendable a día de hoy es el portal Flexicar, que además de ofrecer una gran variedad de opciones en su catálogo, presenta ofertas de verano muy interesantes que estarán vigentes hasta el próximo 12 de septiembre.

Adquirir una furgoneta de segunda mano es una opción bastante rentable para todas aquellos compradores que sean autónomos o empresas, ya que su compra puede traducirse en una reducción del IVA de entre el 50 y el 100%. Además, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) suele ser en torno a un 35% inferior al de otro tipo de vehículos.

furgonetas segunda mano

Un aspecto clave a tener en cuenta a la hora de comprar una furgoneta de segunda mano es su motor, ya que en función del uso que se le vaya a dar necesitarás más o menos potencia. Igual de importante es tener claro el uso que le vamos a dar: si se trata de un vehículo para camperizar, viajar en familia o transportar mercancías. En los últimos años, las furgonetas pequeñas se han convertido en uno de los principales rivales de los SUV y monovolúmenes. Esto se debe a varios factores como la amplitud interior, el número de asientos, la versatilidad, el precio y la gran variedad de carrocerías disponibles.

Por otro lado, también será necesario tener en cuenta el número de kilómetros de la furgoneta, así como el historial de revisiones del vehículo. Es cierto que no es una máxima, pero si esta tiene una rodadura muy amplia podría dar más problemas mecánicos y de mantenimiento. Lo ideal es que si vas a comprar una furgoneta de segunda mano, esta no supere los 100.000 kilómetros.

En relación al tamaño, las furgonetas de los principales fabricantes suelen presentar diferentes longitudes, pudiendo elegir entre L1 y L4. Lo mismo sucede con la altura del vehículo que varía entre H1 y H3. Si se van a realizar desplazamientos por zonas agrarias o terrenos no asfaltados, será necesario plantearse comprar una furgoneta con tracción 4×4.

Por último, en función del peso máximo del modelo, es posible que necesites un carné especial para conducirlo: si supera los 7.500 kg necesitarás el C1. Si pesa menos, con tener el B, más de 23 años y al menos dos de antigüedad con tu licencia, no tendrás problema.