La memoria anual de la Asociación de Operadores Petrolíferos -AOP- ha revelado que el número de estaciones de servicio en España ha batido un nuevo récord. Nuestro país contaba, a finales del pasado curso, con 11.188 gasolineras, por las 10.947 con las que se cerró el año 2015. Se trata de la primera vez que se supera la cifra de 11.000 establecimientos después de que con la crisis económica iniciada en el 2008 las estaciones de servicio comenzaran a decrecer en número.
La principal razón de este aumento se debe a la proliferación de estaciones de bajo coste, también conocidas como low cost. Este tipo de gasolineras suelen ofrecer combustibles de marcas blancas y/o un servicio sin atender por empleados, sino a través de un procedimiento automático, tanto a la hora de repostar como a la de pagar. De esta manera, tienen la posibilidad de ofrecer el carburante a un precio reducido en comparación con las estaciones más conocidas, como Repsol, Cepsa o BP, entre otras marcas.
Estas últimas compañías cuentan en España con unos 6.300 establecimientos, un número similar al de hace seis años. Mientras tanto, las gasolineras de bajo coste ya alcanzan la cifra aproximada de 3.000 estaciones de servicio, 1.000 más que a principios de la presente década.
El fraude, preocupante
A pesar de lo positivo de estas cifras, el informe elaborado por AOP revela que el fraude también se está disparando en el sector. Éste supondría un grave problema, pues ya habría superado los 540 millones de euros anuales, lo cual representaría aproximadamente el 6% del mercado. Entre las trampas más comunes se encontraría el fraude fiscal referente al IVA, además de diversas prácticas ilegales en otro tipo de impuestos.
Recordemos que, dada la gravedad del asunto, a finales del año pasado la Guardia Civil lanzó una operación destinada a la investigación del fraude en el IVA de los hidrocarburos. Entre otras actuaciones, se llevaron a cabo 21 registros en 7 provincias españolas, además de en otras empresas de Italia y Portugal.