Stellantis refuerza su apuesta por España

Stellantis ha confirmado la asignación de la plataforma eléctrica STLA Small a las plantas de Vigo y Zaragoza. Este anuncio garantiza la fabricación de la próxima generación de vehículos del segmento B en ambas factorías y permite mantener la actividad más allá de la próxima década. La decisión se fundamenta en la competitividad de estas instalaciones, el respaldo de las administraciones públicas y el entorno laboral existente.

La plataforma STLA Small, diseñada para vehículos eléctricos de batería (BEV), forma parte de la estrategia de electrificación del grupo. Se trata de una arquitectura multienergía que ofrece una autonomía de hasta 500 kilómetros y permite optimizar los procesos productivos gracias a su diseño modular. Este desarrollo tecnológico está destinado a facilitar la transición hacia una movilidad más eficiente y sostenible, aunque Stellantis no descarta su uso en vehículos híbridos para atender las diferentes demandas del mercado.

Previsiones de Stellantis

Está previsto que las adaptaciones necesarias en las plantas comiencen en 2026, con el objetivo de iniciar la producción en la segunda mitad de 2027. Esta asignación complementa la anunciada a finales de 2024 para la planta de Pomigliano, en Italia, destinada a modelos compactos, y consolida la estrategia global del grupo para optimizar la producción en diferentes regiones.

Por otro lado, Stellantis ha señalado que la planta de Villaverde, en Madrid, seguirá operando más allá de la producción del Citroën C4. Aunque no se han detallado los próximos proyectos para esta instalación, la compañía trabaja en varias opciones que serán comunicadas más adelante. El traslado de la producción del próximo C4 a Kenitra, Marruecos, ha generado inquietud en el sector, pero el grupo asegura que está comprometido con garantizar un futuro para la planta madrileña.

La adjudicación de STLA Small a las fábricas españolas se enmarca en un contexto de transformación de la industria automotriz, que busca adaptarse a las nuevas exigencias regulatorias y a la creciente demanda de vehículos eléctricos. España, además, se beneficia de iniciativas como el PERTE VEC y otros programas destinados a la descarbonización, que han facilitado inversiones importantes en las últimas décadas.

Este anuncio representa un paso más en la estrategia de Stellantis para ampliar su oferta de vehículos eléctricos, pero también pone de manifiesto los retos que enfrenta la industria en términos de competitividad y transición tecnológica.