Desde 44.200 euros

Primera prueba del Jeep Cherokee 2019

Álvaro Ruiz
Álvaro Ruiz
La actualización del Jeep Cherokee llegará a los concesionarios españoles en octubre con modificaciones de gran calado en su diseño exterior. También recibe cambios en el interior y hay novedades en la parte mecánica. Hemos viajado a Sicilia para conducirlo por primera vez.


Desde la llegada al mercado de su primera generación en 1974, el Jeep Cherokee ha sido una de las opciones preferidas por los amantes del offroad que también necesitan un vehículo práctico para sus desplazamientos diarios. Precisamente esa versatilidad es la que ha caracterizado a la quinta entrega del SUV americano desde su llegada al mercado en 2014, pero Jeep ha considerado que era el momento de someterlo a una profunda actualización y el nuevo modelo promete ser todavía más polivalente que la versión comercializada hasta ahora. Para comprobarlo, hemos puesto rumbo a Sicilia y lo hemos conducido por todo tipo de carreteras, caminos y zonas todoterreno.

Jeep Cherokee: así es por fuera

Jeep Cherokee

Aunque los cambios afectan a todo el conjunto, los más significativos tienen que ver con su diseño. Cambia, sobre todo, la parte delantera, que estrena paragolpes y faros Full Led -de serie en todas las versiones- con un aspecto completamente nuevo. En la zaga incluye pilotos traseros rediseñados con una nueva firma luminosa dibujada con tecnología led, pero también es nuevo el portón, que ahora pesa menos e incluye una barra de luces integrada, así como la posibilidad de abrirse con función manos libres, es decir, moviendo la pierna debajo del paragolpes. Menos trascedente es la modificación de la tapa del combustible, que ahora pierde el tapón para facilitar las cosas a la hora de repostar. El catálogo de llantas y la paleta de colores para el exterior también se amplían, con nuevos diseños en el caso de las llantas y hasta 10 colores diferentes si hablamos de las pinturas, incluyendo los nuevos Verde Olive y Blanco Pearl. Por supuesto, se asienta sobre la misma plataforma Compact U.S. Wide -CUS-wide- y sus cotas no varían, por lo que mide 4,62 m de largo, 1,86 de ancho y 1,67 de alto.

Jeep Cherokee: así es por dentro

Jeep Cherokee interior

Dentro, las novedades tienen que ver con los huecos portaobjetos y la tecnología, por lo que el diseño y la disposición de los mandos apenas varían respecto al modelo anterior. Sí hay nuevos acabados, como el Piano Black y el Satin Chrome de la radio, las salidas de ventilación y los marcos del cambio de marchas, que ahora incluye el botón del freno de estacionamiento eléctrico. La pantalla del panel de instrumentos, que cuenta con relojes análogicos para indicar la velocidad y las rpm del motor, puede ser de 3,5″ en escala de grises o de 7″ a todo color. A nivel de espacio, dispone del mismo que su predecesor para los pasajeros, pero el maletero es 70 litros más grande, por lo que su capacidad de carga es de 570 litros y cuenta con un doble fondo.

Jeep Cherokee maletero

En cuestión de equipamiento, el nuevo Jeep Cherokee puede incluir el sistema de infoentretenimiento Uconnect con pantalla táctil central de 7″ u 8,4″. En ambos casos es compatible con Apple CarPlay y Android Auto, pero solo el que tiene la pantalla más grande puede llevar navegador y los servicios conectados Uconnect LIVE, que permiten a los clientes ver y controlar una gran cantidad de aplicaciones en la pantalla del Uconnect conectando el smartphone al vehículo. Más allá del apartado multimedia, destacan los múltiples sistemas de ayuda a la conducción disponibles, entre los que figura la cámara de visión trasera, el avisio de colisión frontal con frenada de emergencia y detección de peatones, el aviso de salida de carril, el control de crucero adaptativo o el sistema de ayuda al aparcamiento ParkSense de ayuda al aparcamiento en paralelo y batería. Además, todas las versiones incluyen ocho airbags de serie.

Jeep Cherokee: así va

Jeep Cherokee carretera

En la parte mecánica, el único motor disponible en España desde su lanzamiento es el turbodiésel 2.2 MultiJet II de 195 CV, que tiene 450 Nm de par y se asocia a un cambio automático de nueve velocidades. Poco más tarde también se podrá escoger el mismo bloque con 150 CV, en ambos casos en las configuraciones 4×2 y 4×4. A lo largo de 2019 se incorporará a la gama un propulsor de gasolina turbo de 2.0 litros que desarrolla 270 CV y 400 Nm de par, en este caso solo habrá posibilidad de combinarlo con la tracción 4×4 y la transmisión automática de nueve velocidades.

Más información sobre el Jeep Cherokee

Si hablamos del sistema de tracción integral, se puede escoger entre dos opciones, el Jeep Active Drive I y el más completo Jeep Active Drive II. El primero se ha rediseñado por completo para reducir peso y mejorar la eficacia del eje trasero; es un sistema de tracción a las cuatro ruedas permanentemente activo que no requiere de la intervención del conductor. En condiciones normales, envía todo el par disponible a las ruedas delanteras mientras controla la velocidad de ambos ejes, si bien puede distribuir el par al 50% entre los dos ejes cuando detecta que hay pérdidas de motricidad en el delantero. El Jeep Active Drive II incluye las funciones del Jeep Active Drive I, pero añade la reductora y el control de descenso. Cuando se lance la variante Trailhawk en el primer trimestre de 2019, se añadirá un tercer sistema 4×4 que solo estará disponible para este acabado todoterreno; será el Jeep Active Drive Lock y, a todo lo que tiene el Jeep Active Drive II, suma el bloqueo del diferencial trasero y el Selec-Speed Control, una función que permite que el conductor seleccione una velocidad, que varía de 1 a 9 km/h, para ascender por rocas, descender/ascender por pendientes extremas o atravesar ríos, es decir, un control de crucero para las zonas offroad más complicadas.

Jeep Cherokee modos de conducción

Todos los sistemas 4×4 incluyen el sistema de control de tracción Jeep Selec-Terrain con cuatro modos de conducción: Auto, Nieve, Sport y Arena/Barro; el Trailhawk añadirá un quinto modo denominado Rock para zonas de campo más exigentes. En todos los casos también se puede desconectar el eje trasero, pero esta función es automática y no hay posibilidad de hacerlo manualmente.

Más información

En la toma de contacto realizada en la isla italiana solo tuvimos la oportunidad de ponernos al volante del Jeep Cherokee 2.2 de 195 CV 4×4, eso sí, en las dos configuraciones de tracción disponibles, es decir, Jeep Active Drive I y II. En carretera no se aprecian diferencias entre uno y otro, pero fuera del asfalto las cualidades todoterreno del que monta el sistema Active Drive II son mejores, puesto que la reductora le permite afrontar zonas más difíciles. Sea como sea, los 1.400 euros de diferencia entre una y otra solo quedan justificados cuando se pisa el campo muy a menudo, ya que el sistema Jeep Active Drive I ya confiere buenas capacidades todoterreno al Jeep Cherokee. Por otro lado, las unidades probadas equipaban neumáticos Michelin Primacy 3 y Continental ContiSportContact 5, por lo que el rendimiento en el campo quedaba condicionado por la naturaleza de las cubiertas; teniendo esto en cuenta, lo más recomendable para los conductores que abandonan la carretera con cierta asiduidad es cambiar los neumáticos de serie por unos M+S, cuyo rendimiento todoterreno está a años luz del que pueden ofrecer los ruteros y deportivos, sin perjudicar por ello el comportamiento del vehículo en carretera.

Jeep Cherokee offroad

Dejando a un lado el comportamiento en el campo, la prueba por los alrededores de Catania nos permitió comprobar que el Cherokee se comporta bien en cualquier carretera. La suspensión es cómoda y contiene bien los balanceos de la carrocería, pero podría filtrar mejor los baches cuando el asfalto está roto. Salvando eso, hablamos de un coche cómodo en cualquier circunstancia, incluso en ciudad, donde sale a relucir la ligereza de la dirección, pero hay un punto que Jeep sigue sin mejorar: la transmisión automática. La buena insonorización del habitáculo y el buen hacer del motor turbodiésel de 2.2 litros, que, a pesar de ser ruidoso, es voluntarioso a cualquier régimen y dispone de una gran cantidad de par, se ven ensombrecidos por una caja de cambios lenta y poco acertada a la hora de elegir la marcha correcta. Aunque en modo manual se puede compensar, en cierta manera, a través de las levas situadas detrás del volante, en el modo automático los cambios entre marcha y marcha son torpes, estirando las velocidades más de la cuenta cuando no toca y tardando demasiado tiempo en reducir cuando pedimos más al pedal derecho.

Disponibilidad y precios

Jeep Cherokee trasera

El Jeep Cherokee 2019 estará disponible a partir de octubre con tres niveles de terminación: Longitude, Limited y Overland. Con el motor 2.2 Diésel de 195 CV, la transmisión automática y la tracción 4×2, su precio de partida con el acabado Longitude es de 44.200 euros, mientras que, con el mismo motor y caja de cambios, la tracción 4X4 Jeep Active Drive II y el acabado Overland, su tarifa asciende a 56.200 euros. A igualdad de condiciones de equipamiento y motorización, la tracción total supone un desembolso extra de 2.000 euros frente a la configuración 4X2.

 

Jeep Cherokee