La tecnología Lexus Hybrid Drive del IS 300h se compone de un motor de combustión 2.5 de cuatro cilindros de ciclo Atkinson, con 181 CV de potencia, inyección directa D-4S y sistema de admisión variable VVT-i Dual. Esta última tecnologia de Lexus abre las válvulas de admisón y cierra las de escape en función del régimen al que está girando el motor, su temperatura, la aceleración que se solicita… La centralita recoge todos estos datos y se encarga de regular el funcionamiento de las válvulas. Con este sistema el motor se ajusta en cada momento a las condiciones de rodaje, se maximiza la potencia que es capaz de entregar y se reducen el consumo y las emisiones.
El propulsor eléctrico aporta una potencia de 105 kW (143 CV). El resultado en prestaciones es una velocidad máxima de 200 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 8,3 segundos. En cuanto a consumo, gasta 4,3 litros a los 100 km, y sus emisiones se sitúan en 99 gramos de CO2 por km recorrido. La marca asegura que su consumo es comparable al de un rival con motor 2.0 diésel. ¿Es eso cierto? Si lo enfrentamos a un Audi A4 2.0 TDI, éste último pierde por los pelos, con 4,5 litros a los 100 km… Lo mismo que el Clase C 220 CDI más ahorrador, con 2.143 centímetros cúbicos de cilindrada y una potencia de 170 CV. Y no hay que olvidar que el IS 300h iguala las prestaciones del Mercedes y supera las del Audi.