Imagino que la llegada de una marca como Lexus a la competición pondrá nervioso a más de un directivo de la industria, ya que el potencial tecnológico y económico de la marca premium del grupo Toyota presagia la entrada en las carreras de coches competitivos y de un nuevo participante que tarde o temprano se convertirá en un duro rival.
No es la primera vez que Lexus se mete en competición: en el campeonato japonés de Super GT, con aquél SC 430 GT 500 en 2006 o en este pasado 2014, con el Lexus RC F, también en Super GT ya estuvieron presentes. Pero la primera consecuencia de la creación del departamento Lexus Racing será la participación en el europeo FIA GT3 con el RC F GT3, que hará sus primeras pruebas en este campeonato.
Lexus Racing nace con dos objetivos fundamentales a corto plazo: centrar la estrategia en competición de forma global de la marca y «conectar» todos los actuales y futuros vehículos «F»(RC F, GS F, etc) con las actividades de competición. Pero por ahora lo primero es homologar el RC F para el campeonato GT3. Como recuerdo, el RC F es un coche de 4,7 metros de largo con 1250Kg de peso que equipa un V8 de 5.0L que entrega 550cv.