Si las escobilllas limpiaparabrisas de tu coche no están en perfecto estado, tu visibilidad puede verse gravemente afectada, por lo que no esperes a que no funcionen para reemplazarlas. Lo recomendable es sustituirlas una vez al año, preferiblemente al comienzo del otoño, y asegurarte de llenar el depósito del líquido limpiaparabrisas con fluido de calidad* -aprox. 3 euros-. Las hay de dos tipos: las ‘clásicas’ de toda la vida y unas más modernas sin estructura metálica -conocidas como tipo aero twin-. Sustituirlas es una operación tan sencilla que si las compras en una tienda de repuestos te las cambiarán gratis, pero conviene saber hacerlo por si las adquieres en un hipermercado, donde además cuestan un 20% menos.
Cambia los limpiaparabrisas de tu coche, paso a paso
1- Levanta con la mano uno de los brazos del limpiaparabrisas para poder cambiar la escobilla de forma cómoda.
2- Una vez esté levantado, verás que la escobilla se puede rotar en sentido antihorario hasta quedarse perpendicular al brazo.
3- Para retirar la escobilla, aprieta el pequeño clip de sujeción a la vez que empujas la escobilla hacia abajo. Verás que sale fácilmente.
4- Para quitar la vieja escobilla, tira de ella suavemente hacia afuera para que salga de su tetón de sujeción.
5- Para colocar la escobilla nueva -desde 7 euros-, introdúcela en sentido inverso a como la sacaste y tira de ella hacia fuera hasta que escuches un ‘clic’.
6- Para poner la nueva -con un precio desde 16 euros-, introduce su agujero por el tetón y gírala en sentido horario.
Ya hay algunos coches, como el Range Rover Evoque, que llevan un sistema más moderno: el brazo del limpiaparabrisas incorpora un botón que basta con apretar para extraer la escobilla -y, para ponerla, se inserta por la guía hasta que suene un ‘clic’-.