Vídeo: Prueba del Mazda CX-5 2.0 Skyactiv-G 2022
El Mazda CX-5 siempre ha sido un modelo habitual en las quinielas de coches comprables de Autofácil, especialmente en su versión más razonable, dotada de un motor 2.0 de gasolina de 165 CV y cambio manual de seis velocidades.
Los motivos son unas dimensiones exteriores contenidas, un diseño elegante (desde el restyling de 2017), una buena habitabilidad y relación precio-equipamiento, unas prestaciones y acabados adecuados y una puesta a punto del chasis en la que se nota que se ha puesto mimo, con una dirección precisa y un cambio con un tacto agradable y que resulta preferible a la alternativa automática, también de seis velocidades.
En resumen, su planteamiento es el mismo que el de cualquier otro Mazda: un modelo al nivel de las marcas premium a un precio más asequible y sensiblemente más refinado que sus alternativas generalistas.
Respecto a esas cualidades, el restyling que acaba de recibir aporta un diseño más actual y sofisticado. Hay algunos cambios estéticos, como los del diseño del frontal, o unos pasos de rueda grises, los detalles en verde lima y la pintura gris zafiro del acabado Newground que hemos probado. También han mejorado los asientos (aunque es justo decir que los de antes ya eran cómodos).
La gama
El Mazda 2.0 Skyactiv-G CX-5 monta un cambio manual aunque, opcionalmente, se ofrece cambio automático de seis velocidades. Asimismo, el cliente también puede optar a que su CX-5 tenga tracción a las cuatro ruedas.
Esta versión, con el mencionado motor 2.0 de 165 CV, tiene un precio oficial de 30.900 euros, mientras que la versión 2.5 de 194 CV asciende a los 39.700 euros. En diésel, este Mazda está disponible con un bloque de 2.2 con dos potencias: 150 CV (33.900 euros) y 184 CV (37.700 euros). Todos los precios hacen referencia al acabado básico Origin, salvo el de la versión gasolina de 194 CV, disponible a partir del acabado Newground.
Por dentro, con el debido cariño
Los pespuntes y detalles en color lima son lo primero que llama la atención en un interior bien rematado, con buenos materiales y dotado de una ergonomía correcta. Los nuevos asientos, tapizados de símil cuero y piel vuelta sintética, sujetan el cuerpo bastante bien, y son confortables. Detrás, hay espacio suficiente para que dos personas viajen de manera cómoda, y el maletero es grande; tiene 522 litros y una bandeja con doble cara que se puede ubicar a dos alturas.
Si detestas los mandos táctiles difíciles y peligrosos de usar en marcha el Mazda CX-5 te va a encantar, porque la pantalla se maneja a través de un mando giratorio denominado HMI (Human Machine Interface), con el cual aumenta la ergonomía y la seguridad durante la conducción.
En marcha: cómodo y agradable de conducir
El Mazda CX-5 es confortable y agradable de conducir. Tanto el cambio, como la dirección, ofrecen un reconfortante grado de precisión, el tacto de la suspensión es conectado (sin llegar a resultar incómodo) y los movimientos de la carrocería están bien contenidos.
El motor 2.0 Skyactiv-G es atmosférico y ofrece un buen rendimiento y, sobre todo, un consumo contenido mientras se realice una conducción tranquila. Entrega lo mejor entre las 4.000 y 6.000 rpm, una horquilla en la que se muestra un poco más vivaz y ruidoso. Las prestaciones son decentes (ideales para un uso familiar), y seguro que la fiabilidad es elevada.
No se echan en falta asistentes a la conducción. De serie, este acabado Newground que hemos probado incorpora numerosos sistemas de seguridad activa que Mazda denomina i-ACTIVSENSE, como el detector de tráfico trasero (RCTA), el control de ángulo muerto (BSM), los faros delanteros direccionales (AFS) o el Head up Display proyectado.
Ficha técnica del Mazda CX-5 2.0 Skyactiv-G 2022
- Motor: Gasolina, 4 cilindros atmosférico, 1.998 cm3
- Potencia máxima: 165 CV (121 kW) a 6.000 rpm
- Par motor: 213 Nm a 4.000 rpm
- Tracción: A las ruedas delanteras
- Cambio: Manual de 6 velocidades
- Velocidad máxima: 201 km/h
- Aceleración 0-100 km/h: 10,5 segundos
- Consumo medio: 6,8 L/100 km
- Emisiones CO2: 153 gramos/km
Veredicto
El renovado Mazda 2.0 Skyactiv-G CX-5 es un coche ‘honesto’, que ofrece un grado de refinamiento superior al de sus rivales generalistas, pero sin la elevada tarifa de las alternativas premium. Destacamos como puntos positivos la relación calidad/precio/equipamiento y el tacto cuidado, y como negativos sus prestaciones algo justas y la ausencia de etiqueta Eco. Es, en definitiva, un modelo bastante recomendable.