Hace unas pocas horas te contábamos como sería el futuro SUV de Mercedes-Benz híbrido enchufable con pila de combustible de hidrógeno, el GLC F-CELL. Pero en su presentación no ha sido el único protagonista, ya que la marca alemana también ha mostrado, acorde con la corriente de nuevos sistemas de propulsión alternativos a la gasolina y el diésel, un sistema de carga inalámbrico y lo que es más importante: una plataforma que permitirá a los modelos de la compañía de Stuttgart recorrer 500 km con una sola carga eléctrica.
En la creación de esta base, Mercedes-Benz ha centrado sus objetivos en dos pilares fundamentales: reducción de costes y posibilidades de uso. El primer aspecto lo ha solucionado mediante el uso de piezas compartidas en diferentes modelos, mientras que la posibilidad de crear varios coches a partir de ésta gracias a su modularidad facilita la segunda cuestión a tener en cuenta. Además, gracias a las baterías de iones de litio desarrolladas por la empresa Accumotive -filial de Mercedes-Benz-, los modelos que cuenten con esta plataforma tendrán la autonomía mencionada anteriormente, superando a sus rivales directos y situándose a la altura de las mejores cifras de Tesla, actualmente referente en la categoría.
Con la inclusión de esta nueva tecnología, la firma de la estrella busca garantizar que el usuario pueda realizar trayectos por ciudad y hasta un viaje de una distancia media sin tener que recargar el vehículo. De hecho, desde Mercedes-Benz se cree que en la próxima década las baterías duplicarán su densidad energética y que los costes de producción de éstas se reducirán a la mitad. Hasta entonces, el fabricante alemán se centrará en el despliegue de la tecnología híbrida a través de toda su gama.