Han pasado más de 40 años desde que Nissan presentó por primera vez el Micra. Cinco generaciones después, y tras un paréntesis en el mercado español, el modelo vuelve como eléctrico puro, dispuesto a dar un golpe sobre la mesa en el segmento B. Pero esta no es una evolución más: el nuevo Micra se ha reinventado desde los cimientos, apostando por diseño, tecnología y un enfoque absolutamente europeo.
Hemos tenido la oportunidad de conocerlo de primera mano, antes de su llegada a los concesionarios, en un espacio muy especial: un estudio de fotografía y rodaje en Vic, reconvertido en plató exclusivo para la presentación estática del coche. Allí, sin filtros, lo hemos podido ver, tocar, medir y grabar en detalle para mostraros todo en nuestro vídeo. Lo que sigue es el resultado de esa experiencia directa, entre focos, planos detalle y puertas que se abren y cierran con ese clic tan satisfactorio.
El coche llegará a finales de 2025, pero ya podemos adelantar que no es un Micra como los de antes. Aunque hereda el nombre, cambia todo lo demás. Y en ese todo se incluye lo más importante: la manera en la que te hace sentir cuando lo tienes delante y te subes a bordo. Un coche compacto, sí, pero con mucho que decir.

Exterior: entre el utilitario y el SUV
A primera vista, el nuevo Micra impone. Con solo 4 metros de largo, consigue parecer mucho más coche gracias a sus proporciones, los pasos de rueda marcados, las llantas de 18 pulgadas y detalles como el labio inferior del paragolpes, que refuerza su estética crossover. En persona —y en vídeo se aprecia aún mejor— esa presencia se nota nada más entrar en el plató: es un coche que se planta.
Diseñado en Londres en el centro Nissan Design Europe, este Micra se aleja del estilo retro de otros eléctricos urbanos y apuesta por una estética limpia y moderna. Nos ha encantado ver de cerca cómo están resueltos detalles como los faros delanteros, que te saludan con una animación de luces cada vez que abres o cierras el coche. O ese famoso “filete” lateral que Nissan llama «bola de helado»: una hendidura muy precisa que recorre la carrocería y que solo puede lograrse con las nuevas técnicas de estampado.
Lo mejor es que todo esto no es solo diseño para la galería: en persona, el coche transmite solidez y buen hacer. Las juntas están bien rematadas, las superficies tienen tacto de coche más caro y la variedad de colores —14 combinaciones posibles, algunas con techo en contraste— lo convierte en un modelo mucho más personalizable de lo que solemos ver en este segmento.

Interior: entre pantallas y monte Fuji
Una de las mayores sorpresas al abrir la puerta del nuevo Micra es lo bien aprovechado que está el espacio delantero. Gracias a la plataforma AmpR Small, el puesto de conducción es amplio, el salpicadero bajo y la visibilidad buena. En el centro encontramos dos pantallas de 10,1″, con sistema operativo Android Automotive y todos los servicios de Google integrados. En el vídeo podréis ver cómo se manejan, cómo lucen las transiciones y cómo permiten hasta descargar apps de Google Play directamente al coche.
En nuestro contacto estático, los materiales nos sorprendieron para bien: superficies blandas, buen tacto de botones y un diseño general sobrio, pero elegante. En función del acabado —Acenta, N-Connecta o Tekna— cambia la tapicería y se puede acceder incluso a una iluminación ambiental personalizable con 48 colores, que pudimos probar allí mismo con varios planos de luz durante la grabación.

El espacio en las plazas traseras es correcto sin milagros, como corresponde a un coche de 2,54 metros de batalla. En el vídeo puedes comprobar cómo estamos de espacio con el asiento delantero ajustado a mi estatura. El maletero, en cambio, ofrece un notable volumen de 326 litros y formas muy aprovechables. Incluso colocamos algunos bultos durante el rodaje para comprobarlo y la versatilidad es superior a la media.

Personalización
Más allá del diseño, lo que más promete este Micra es cómo se adapta al conductor. Aunque no hemos podido conducirlo aún, sí hemos podido trastear con su interfaz y comprobar cómo permite elegir entre cinco modos de conducción, incluyendo uno personalizable donde se ajustan al gusto la dirección, respuesta del motor y regeneración. Y sí, cuenta con levas tras el volante para cambiar el nivel de frenada regenerativa, algo poco habitual en coches urbanos.
Este nuevo Micra incorpora también el sistema e-Pedal heredado de otros modelos Nissan, que permite conducir con un solo pedal en ciudad, ajustando la frenada regenerativa para parar el coche completamente sin tocar el freno.

En cuanto a motorizaciones, habrá dos opciones: una de 122 CV con batería de 40 kWh y otra más potente, con 150 CV y 52 kWh, capaz de alcanzar hasta 410 km de autonomía. Ambas se podrán cargar en corriente continua —hasta 100 kW en la versión grande— en solo 30 minutos del 15 al 80%. Además, ambas versiones incorporan tecnología V2L, para alimentar dispositivos externos con la energía de la batería. Algo muy útil y que también pudimos comprobar en una demostración práctica con accesorios reales durante el rodaje.
Verlo en persona, tocarlo, sentarse dentro y descubrir sus detalles nos ha permitido entender qué pretende Nissan con este nuevo Micra. No es solo un coche eléctrico pequeño, es un coche que quiere emocionar, facilitar la vida diaria y, al mismo tiempo, diferenciarse. En el artículo hemos intentado contártelo todo con palabras, pero te recomendamos también echar un vistazo al vídeo, donde muchas de las sensaciones cobran vida en imágenes.
El Micra de sexta generación llegará a las calles a finales de 2025. Y después de este primer encuentro exclusivo, podemos decir que lo esperamos con muchas ganas. Porque hay coches que se entienden con los datos… y otros, como este, que se entienden mejor cuando los ves de cerca.
