Si ayer estuviste atento a nuestra web, habrás podido ver que estuvimos algunos días probando el Alfa Stelvio en su versión de gasolina de 280 CV, que es una de las cuatro que ahora mismo existen en la gama. En caso de que no leyeras la prueba, te la dejo aquí de nuevo.
Pero a fin de cuentas ese Stelvio que probamos, entre el motor, el acabado Veloce y el equipamiento extra que llevaba, sobrepasaba los 70.000 euros de precio. No está al alcance de demasiada gente. Entonces, ¿qué pasa si nos vamos al Stelvio más barato? ¿Qué perdemos respecto a aquel?

Actualmente, el Stelvio más económico de la gama lleva la terminación Sprint y el motor diésel en su versión de 160 CV. Y, francamente, puede que sea el más razonable de la gama. Con 160 CV, este motor 2.2 turbodiésel ya puede acelerar de 0 a 100 km/h en unos más que válidos 8,8 segundos, alcanza 198 km/h y homologa un consumo mucho más contenido: 5,8 L/100 km. La transmisión sigue siendo la ZF de ocho velocidades y convertidor de par.
Ese consumo se ve beneficiado por el hecho de que esta versión sea la única de la gama que no incorpore tracción total, sino sólo trasera. Menos peso con el que cargar y menos pérdidas que sufrir. Y a fin de cuentas, dada la idiosincrasia del modelo, prescindir de la tracción en el eje delantero es algo perfectamente lógico.
Y luego, en cuanto a equipamiento, la terminación Sprint (también había una Super por debajo pero ya no aparece en el configurador de la marca), incluye bastantes cosas, pero prescinde de otras propias del acabado Veloce, como el diferencial autoblocante.
El Stelvio Sprint ya tiene de serie llantas de 19″, cuadro digital de 12,3″, pantalla central de 8,8″ con Android Auto y Apple CarPlay, navegador, cargador inalámbrico para smartphone, portón trasero eléctrico, asistente de mantenimiento de carril, frenada de emergencia autónoma, cámara trasera, llave manos libres, retrovisores plegables de manera eléctrica, faros de led matriciales o las fantásticas levas metálicas en el volante.

Y su precio parte de 52.122 euros si gestionas la compra a través de la página web, pues resulta que algunas de las marcas del Grupo Stellantis (las que vienen de la rama FCA) bonifican esta práctica ofreciendo un precio sensiblemente menor que el que se oferta en el concesionario.
De modo que ahorrarte casi 20.000 euros respecto al Stelvio 2.0 Turbo de 280 CV que probamos en esta semana supone renunciar a 120 CV de potencia, a la tracción total, al diferencial autoblocante y a determinado equipamiento, parte del cual era opcional en la unidad que probamos. Sin embargo, las prestaciones de este versión diésel son muy dignas, la tracción total puede ser prescindible en un momento dado y el diferencial autoblocante sólo lo echarás de menos si practicas una conducción deportiva. Tiene lógica, ¿no?
