No cabe duda de que el Opel Insignia es uno de los modelos más imponentes de la categoría. Y es que con sus 4,89 metros de largo en la versión cinco puertas -Grand Sport- y 4,98 en el familiar -Sports Tourer-, se posicionan por encima de otros rivales como el Ford Mondeo, Mazda6, Peugeot 508, Renault Talisman, Skoda Superb o Volkswagen Passat.
Con semejantes competidores en el mercado, Opel no puede relajarse lo más mínimo si no quiere ver mermado el nivel de ventas de su Insignia. Por eso ha estrenado un restyling que actualiza su estética, introduce nuevas tecnologías y, lo más importante, revoluciona la gama mecánica. Precisamente nos vamos a centrar en este último aspecto, ya que la firma nos sorprende con opciones poco convencionales en el segmento.
Lo más llamativo es el nuevo propulsor diésel 1.5D de tres cilindros con 122 CV, un motor que ya hemos visto en el Astra y que ahora llega al buque insignia alemán. Asociado a una caja de cambios manual de seis relaciones, el Insignia transmite sus 300 Nm de par máximo al eje delantero, acelera de 0 a 100 km/h en 10,6 segundos y alcanza una velocidad punta de 208 km/h. En lo referente a sus consumos, la marca declara un gasto medio de 4 litros/100 km, y para mejorar su faceta medioambiental recurre a un dispositivo con AdBlue.
Esta mecánica no solo se ofrece con la carrocería de cinco puertas del Opel Insignia. Los que demanden más espacio y maletero tienen a su disposición la variante familiar Sports Tourer. En este caso, alcanza los 100 km/h desde parado en 10,8 segundos, fija la misma velocidad punta y eleva el gasto medio a 4,2 litros/100 km.
En breve la nueva gama Opel Insignia estará presente en los concesionarios españoles. Además, llegarán otros motores más potentes para satisfacer a los usuarios más exigentes. Mientras tanto, ya vemos como los propulsores de tres cilindros incrementan su protagonismo en los modelos más representativos de los fabricantes, tal y como nos demostró Ford con su gasolina 1.0 EcoBoost de 125 CV montado sobre el imponente Mondeo antes de su restyling.