Como ya te contamos anteriormente, Ford preparó su furgoneta eléctrica, el Ford Pro Electric SuperVan 4.2 para la subida de montaña más famosa -y complicada- del mundo. Nada menos que Pikes Peak, un recorrido ‘hacia las nubes’ que contiene nada menos que 156 curvas y una desnivel total de 1.440 metros. Reto en el que Ford estuvo presente en sus inicios, con un Model-T en 1916, y que ahora evoluciona con una súper furgoneta eléctrica prepara para la ocasión.
Partiendo de la base que ofrece el Ford E-Transit, este Ford Pro SuperVan 4.2 hacía gala de tres motores eléctricos para una potencia de 1.400 CV. Por supuesto, dispone de un sistema de tracción a las cuatro ruedas para ofrecer la mejor aceleración posible. Como es habitual en esta competición, la aerodinámica se ha llevado al extremo. Grandes y protuberantes alerones permiten a este vehículo generar una increíble carga aerodinámica. De hecho, es capaz de generar 1.995 kg cuando circula a una velocidad de 241 km/h.
Este modelo dispone también de un sistema de frenada regenerativa de nada menos que 600 kW, lo que le permite recuperar grandes cantidades de energía durante las deceleraciones. Para acometer esta subida, Ford confió en la experiencia de Romain Dumas, piloto que ostenta en la actualidad el récord absoluto en Pikes Pike y que, también, ha logrados dos veces vencer en las 24 Horas de Le Mans.
Victoria y récord en su categoría
A pesar de un tiempo de tan sólo seis semanas para preparar el Ford Pro SuperVan 4.2 e incluso experimentar problemas técnicos momentos antes de la subida, la furgoneta eléctrica de la marca del óvalo se llevó la victoria en su categoría y una marca que destrozó el récord anterior. La categoría Pikes Peak Open reúne a los prototipos con ciertas similitudes con el modelo de producción, y es sólo superada por las clases Open Wheel y Unlimited, donde tienen cabida vehículos sin ningún tipo de limitación reglamentaria.
Así las cosas, Dumas fue capaz de parar el crono a 4.302 metros sobre el nivel del mar en 8 minutos y 47,682 segundos, lo que no sólo le brindó la victoria, sino que además logró aplastar la marca anterior en 37 segundos, la cual permanecía imbatible desde 2019.
Sin embargo, la victoria absoluta fue para Robin Shute que, a los mandos de un Wolf TSC-FS perteneciente a la categoría Unlimited, consiguió hacer un tiempo de 8 minutos y 40,080 segundos. Con dicho registro, el Ford Pro SuperVan 4.2 se llevó la segunda plaza en la clasificación general, certificando el potencial de este prototipo eléctrico. A continuación te dejamos un vídeo donde se resume la participación de Ford en la subida de Pikes Peak.