El Asistente de Marcha Atrás de BMW o cómo deshacer tu última maniobra

Álvaro Sauras
Álvaro Sauras

Este sistema de asistencia al aparcamiento de BMW es capaz de deshacer, marcha atrás y con precisión, la última maniobra que has realizado conduciendo hacia delante, sacándote sin esfuerzo de los huecos y callejones más complicados.

A lo largo de la historia, hemos conocido muchos sistemas de ayuda al aparcamiento, como por ejemplo los sensores de ultrasonidos, la cámara de marcha atrás, la cámara perimétrica (o de vista de pájaro, que muestra una vista cenital simulada del vehículo), el aparcamiento automático en línea y batería o incluso ese sistema que permite sacar el coche de huecos estrechos de manera remota, sin estar físicamente al volante.

Sin embargo, lo cierto es que nunca nos ha impresionado demasiado ninguno. Todos son más o menos útiles, pero hasta ahora no habíamos dado con uno que hiciera exactamente a la perfección lo que prometía… al menos, hasta que hemos descubierto el asistente de marcha atrás de BMW. Por fin un sistema eficaz, práctico, asequible y fácil de utilizar. ¡Aleluya!

Así funciona

21 metros señalando

En concreto, el Reversing Assistant memoriza los últimos 50 metros que has conducido hacia delante y a una velocidad inferior a 35 km/h. Una vez que apagas el coche, ese trayecto siempre queda guardado en la memoria del coche.

Después, cuando regresas al vehículo, basta arrancar el motor y seleccionar la marcha atrás en el cambio automático para que, a la derecha de la imagen que capta la cámara de marcha atrás, aparezca una pequeña casilla de verificación titulada «Asistente de marcha atrás».

Casilla verificación

Cuando pulsas, ocurren dos cosas. Primero, en el volante se iluminan dos luces verdes que te indican que el sistema está preparado. Después, en la pantalla parece una indicación que te informa de cuántos metros tiene memorizados el sistema, hasta un máximo de 50 metros. Esta cifra podría ser inferior si, por ejemplo, hemos superado los 35 km/h o hemos realizado una maniobra marcha atrás en los últimos 50 metros. En este último caso, el sistema memoriza los últimos metros que hemos realizado conduciendo hacia adelante.

Entonces, basta con soltar el freno y dejar que el coche deshaga la maniobra, girando el volante de forma automática y mientras nosotros nos concentramos exclusivamente en que el coche no gane mucha velocidad, sujetándolo con el freno. El sistema es capaz de retroceder hasta a 10 km/h; una velocidad que resulta aterradora en un entorno flanqueado de columnas, recodos y otros coches aparcados.

Si el escenario ha cambiado desde que aparcamos el coche, el asistente de marcha intenta realizar la maniobra igualmente. Por ejemplo, si alguien aparca un coche que antes no estaba, el asistente de marcha atrás lo ignora y reproduce la maniobra.

Si el nuevo obstáculo se encuentra muy cerca de la trayectoria que vamos a seguir, el Asistente de Marcha Atrás matiza cuidadosamente la trayectoria original para salvarlo. Obviamente, si el obstáculo está en medio de nuestro camino, es detectado por los sensores de ultrasonidos y la cámara y la maniobra se aborta. El conductor también puede interrumpir la maniobra en cualquier momento seleccionado la D o oponiéndose levemente al movimiento del volante.

Dos experimentos: laboratorio y mundo real

Hemos probado este sistema de dos maneras distintas y con dos BMW diferentes. Primero, hemos usado un BMW Serie 8 y un recorrido simulado en un lugar sin peligros como un helipuerto. Después, hemos repetido la prueba en el garaje de la redacción, con un coche mucho más grande y en unas condiciones mucho más severas.

BMW Serie 8 marcha atrás

El resultado de la primera prueba ha sido impecable. El Serie 8 ha reproducido con una precisión del orden de cinco centímetros los 50 metros de recorrido, pasando junto a los conos a las distancias exactas, pisando las líneas correctas€ ha sido todo perfecto.

El resultado de la segunda prueba también ha sido muy bueno. En este caso, le hemos complicado las cosas al sistema al máximo. Para empezar, hemos empleado un BMW X7: el coche más voluminoso y difícil de maniobrar de toda la gama de BMW.

Después, le hemos dejado varios coches aparcados en su camino, de manera que la holgura en el pasillo disponible para pasar era inferior a un metro.

Tras superar ese estrechamiento, hemos realizado un giro a la izquierda en el que el paragolpes delantero ha pasado a una distancia de la pared equivalente al diámetro de una lata de refresco.

Además, antes de salir, hemos movido ligeramente los coches que hemos generado para producir el estrechamiento. Y finalmente, hemos ejecutado la maniobra con pequeños cambios de velocidad. El motivo es que nuestra experiencia con los sistemas de apàrcamiento automático nos ha enseñado que el máximo error en la maniobra de aparcamiento se produce cuando ésta no se ejecuta a una velocidad baja y uniforme.

BMW X7 marcha atrás

El resultado ha vuelto a ser excelente. Al deshacer la curva a izquierdas hemos pasado genuinamente miedo, porque el paragolpes se ha situado a unos 7 cm del muro, pero el sistema no ha dudado… ni ha colisionado.

El estrechamiento que hemos generado moviendo los coches le ha obligado a realizar una ligera corrección que le ha apartado levemente de su trayectoria original, pero la ha recuperado casi totalmente, llegando al final del recorrido con una desviación transversal de unos 40 centímetros.

También hemos probado colocando obstáculos en su trayectoria… e incluso obstáculos ‘dinámicos’ (peatones), y en todos los casos ha resuelto la papeleta de forma satisfactoria.

Veredicto:

En definitiva, se trata de un sistema sencillo y excelente. Ya está disponible en los BMW Serie 3, Z4, Serie 8 y X7, y se seguirá extendiendo por toda la gama a medida que BMW vaya aplicando sucesivos restylings a sus modelos. En el Serie 8 y X7 es un equipamiento de serie, mientras que modelos como el Serie 3, es opcional, y forma parte del Parking Assistant Package, que cuesta desde 625 euros e incluye la cámara de marcha atrás, de manera que la relación prestaciones/precio es sobresaliente.

 

 

BMW Z4