Por dentro y por fueraLos neumáticos son unos Goodyear Eagle F1 de 245/45-18 -280- cada uno-.Los anclajes de la capota podrían disimularse más… al menos, están cromados. El depósito se abre con una segunda llave: algo propio de la época del Seat 127.Los faros son bonitos… pero muy sencillos: no ofrece Led’s y, en el caso de los delanteros, no hay xenón ni en opción. La luz de marcha atrás y el antiniebla van en el centro. La apertura del capó motor es espectacular… y todo resulta muy accesible. Los retrovisores son bonitos… pero ‘ayudan’ a que el GT genere mucho ruido aerodinámico. Estas dos pequeñas jorobas tienen la función de mejorar la aerodinámica cuando vas ‘descapotado’; además, quedan muy bonitas. Los mandos de los elevalunas y de los retrovisores son de lo más sencillo. La instrumentación resulta excesivamente simple… hasta que descubres el completo ordenador de a bordo de serie. Las dos guanteras son bastante prácticas. Los mandos del aire acondicionado -no puede llevar climatizador ni en opción- y de la radio son muy sencillos de manipular. La eficacia del ‘aire’ es correcta sin más, al igual que la calidad del equipo de audio.
CONDICIONES-DE-LA-PRUEBA Y DEL VEHÍCULO Km al inicio: 3.231 km Temperatura ambiente: 24º C Presión atmosférica: 929 mbar Peso en báscula: 1.450 kg aprox. Reparto del./tras.: 51/49% Neumáticos: Goodyear Eagle F1 (245/45 R18) Presión del./tras.: 2,0/2,0 bar.
Curva de potencia: El ‘patadón’ del turbo por encima de 2.500 rpm es lo más llamativo. Curva de par: La sobrealimentación consigue que mantenga unos valores muy similares. Medidas
¿Estás gordito? Pues si lo estás, tendrás problemas para viajar con comodidad en el Opel GT, que no resulta especialmente amplio en ningún sitio. El espacio disponible es escaso en las plazas delanteras -no hay traseras-, mientras que los 157 litros de maletero resultan muy justos… |
AceleraciónLo esperado… Las aceleraciones del Opel GT coinciden prácticamente con las anunciadas por la marca. Son razonables teniendo en cuenta su potencia y su peso, pero mejorarían con un cambio de seis marchas con unos desarrollos algo más cortos.
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ConsumoSi pisas… El GT tiene un consumo algo más elevado de lo esperado para sus características -por su relativamente bajo peso, su potencia, su inyección directa de gasolina…-, y que se dispara si practicas una conducción deportiva.
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AdelantamientoBuenos registros, pero… Las cifras de recuperación son bastante buenas, gracias a la sobrealimentación del turbo. Eso sí, mejorarían, como en el caso de las aceleraciones, con un cambio de seis marchas con las primeras velocidades más ‘cortas’ y si el turbo tuviera un poco menos de retraso inicial en su respuesta.
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SonoridadLo mejor, ponerse unos taponcitos… El GT es un modelo ruidoso, especialmente por la cantidad de sonidos aerodinámicos que llegan al interior en cuanto pasamos de 60 km/h. A ello tampoco ayuda el hecho de que sea bastante complicado dejar la capota perfectamente acoplada -quizá, un problema de nuestra unidad-…
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FrenadaTenía los frenos algo ‘tocados’… En nuestras pruebas, los frenos del Opel GT han obtenido unas distancias de deceleración correctas sin más y, por resistencia, se han mostrado algo justos. Eso sí, por el ruido y el tacto del pedal que tenía nuestra unidad, los frenos de este GT no estaban en su mejor momento…
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Qué debes saber de…Javi VillaQuién es…Nació hace 21 años en Colunga -Asturias- y, en la actualidad, es piloto del equipo Racing Engineering en el campeonato del mundo de GP2. Su palmarés… Debutó en kárting en 1996. En 2002, se pasó a los monoplazas, tras ser seleccionado por el Repsol Racing for Spain. Desde 2006 participa en GP2, donde la temporada pasada ganó tres carreras y logró cinco podios. Curiosidades…Javi Villa está en el punto de mira del equipo BMW Sauber de Fórmula 1; de hecho, el pasado invierno hizo un test en Jerez con esta formación. |
Pero no adelantemos acontecimientos, pues hay que tomárselo todo con mucha calma antes de llegar a todas estas conclusiones.Si no, probablemente, este roadster te acabará defraudando.
Quizá la primera sorpresa, la del diseño, es la que menos haya que argumentar: basta con observar al GT desde cualquier perspectiva para encontrarte con un modelo muy bonito, con un clásico techo de lona negro -que se acciona manualmente; no ofrece uno eléctrico ni en opción-, unas bonitas llantas de 18 pulgadas y unos faros que recuerdan mucho a otros modelos de Opel, como el Astra. El interior, por el contrario, te sorprende… pero de forma negativa. Para empezar, sus acabados son mejorables tanto por ajustes -es fácil escuchar ‘grillos’ en zonas bacheadas- como por materiales elegidos- abusa de los plásticos-… pero es que, además, rápidamente descubres que hay tan poco espacio disponible para ti y tu acompañante que, incluso, llega a resultar algo claustrofóbico; de hecho, es fácil rozar la puerta continuamente con el brazo o notar como tus piernas ‘hacen tope’ en los laterales… Con todo, no resulta extraño que el maletero -ubicado detrás- sea casi testimonial: ofrece unos escasos 157 litros… Al menos, sus dos plazas cuentan con unos asientos bastante cómodos -aunque podrían sujetar mejor la parte superior de la espalda-, y la postura de conducción es más que buena: resulta muy baja y vas con las piernas estiradas casi por completo. ¡En cierta forma, me recuerda a mi monoplaza de GP2! Eso sí, se agradecería que el volante -por cierto, poco deportivo- tuviera reglaje en profundidad. Por lo que respecta a la instrumentación es muy sencilla, pero se completa con un ordenador de a bordo que incluye funciones tan útiles -y poco habituales- como la que te indica cuánto le queda de vida útil al aceite motor. Arranco….El sonido del motor es deportivo y tan llamativo que inunda con sutileza el interior; nada más ponerme en marcha descubro que nunca será molesto… porque el que de verdad se hace notar en demasía es el ruido de rodadura y aerodinámico -debido en gran parte a que el techo de lona no queda perfectamente acoplado-. Apenas he superado los 100 km/h y ya tengo claro que este Opel GT no es el más indicado para viajar con comodidad por autopista… así que no tardo en buscar una salida hacia una carretera de montaña. Al desviarme, llego a un Stop. No hay nadie. ¡Aquí va a ser! Salgo en primera velocidad: el motor 2.0 turbo con 16 válvulas de 264 CV empuja con contundencia, sobre todo entre 2.000 y 6.000 rpm… tanto que, cuando quiero darme cuenta, ya he agotado la segunda y la tercera marcha. La verdad, no me extraña que el GT, con un peso de sólo 1.395 kilos, precise de sólo 5,7 segundos para pasar de 0 a 100 km/h… Corre, vaya que si corre, pero enseguida me doy cuenta de cuáles son sus dos únicos puntos débiles: uno, que en cuanto empiezas a pisarle ‘de verdad’ consume como un cosaco -la media ronda los 20 l/100 km; lo normal es consumir entre 8 y 10 l/100 km, que no está nada mal-; y, dos, que en determinados momentos, al acelerar con fuerza desde bajas revoluciones, el turbo muestra cierto retraso en su respuesta… La verdad, esto último me ha sorprendido bastante ya que, precisamente, para evitarlo este GT incluye un turbo de tipo Twin Scroll -el conducto por el que llegan los gases de escape para accionar el turbo se divide en dos partes en lugar de tener sólo una-… Por cierto, este motor está muy avanzado desde un punto de vista tecnológico, pues, además de lo anterior, añade el sistema de distribución variable -varía el momento de apertura de las válvulas en función de las revoluciones para mejorar el rendimiento- e inyección directa de gasolina. Así, creo que las pequeñas ‘pegas’ que tiene este motor no son capaces de empañar el resultado, algo que quizá sí puede conseguir el hecho de que este Opel sólo disponga de un cambio manual de cinco velocidades; que tiene un buen tacto, durito y bastante preciso -aunque el pomo sea demasiado grueso-, pero unos desarrollos algo largos, que en zonas muy reviradas no te ayudan a exprimir todas las bondades del motor… y del chasis. El chasis también me ha sorprendido. Al principio, percibes que va blando de suspensión e, incluso, cuando aceleras con fuerza notas que hasta la dirección pierde tacto por lo mucho que se levanta el morro, pero en cuanto empiezas a enlazar curvas a la velocidad que te permiten esos 264 CV llegas a la conclusión de que el resultado no es malo. Es más, el hecho de que vaya un poco blando tiene sus ventajas: la capacidad de tracción es muy buena -algo vital en un propulsión trasera como éste- o que puedes sentir perfectamente y ‘a cámara lenta’ todas las reacciones del coche. Es decir, este Opel se muestra muy predecible; algo que, unido a su tremenda agilidad, consigue que disfrutes con la conducción una barbaridad. Muy pronto empiezas a disfrutar con el GT, y no tardas en descubrir cómo sacarle la ‘quinta esencia’… hasta que llegas al límite de los controles electrónicos de tracción y de estabilidad de serie. En ese momento, comienzas a notar cómo el de tracción se activa cada vez que intentas acelerar con contundencia a la salidas de las curvas… y eso ya no es tan divertido. Pero, afortunadamente, en Opel han dotado a este control electrónico de la posibilidad de eliminar el de tracción… pero dejando conectado el de estabilidad ESP. Para ello, sólo tienes que pulsar una vez el botón de la consola central. Y, así, sí que te lo pasas bien, porque este GT, como mucho, insinúa una ligera derrapada que nunca se produce… y te permite acelerar con fuerza en todo momento. Existe otra posición que desconecta también el ESP -para ello, debes mantener pulsado unos segundos el citado botón-… pero lo mejor es que te olvides de ella -a no ser que estés en un circuito-, pues por muy bien que vaya el GT, si te equivocas sin ayudas electrónicas tienes todas las papeletas para acabar fuera de carretera… La verdad es que me lo estoy pasando bien. Tan sólo me gustaría que, en zonas bacheadas, la dirección no tendieran a moverse tanto; está bien que te informe de lo que ocurre entre las ruedas y el asfalto, pero no es necesario que lo haga con una nitidez tan exagerada… Respecto a los frenos, que me han gustado por tacto y por tener un recorrido de pedal más bien corto, noto que ahora empiezan a desfallecer. Para ser francos, han aguantado bastante y, probablemente, serán más que suficientes, pero no son ‘indestructibles’… Por último, la gran sorpresa llega cuando te dicen que este coche cuesta 32.080 euros. Sinceramente, por acabados o por su mala insonorización, no parece que los valga… pero, en realidad, en el mercado no hay nada que corra tanto, que sea tan rápido en curva, que puedas descapotar… y que te permita bajarte de él con una sonrisa de oreja a oreja por menos dinero. ¿No te lo crees?… Pues mira: lo más parecido es un Honda S2000, que con 240 CV se cotiza a 43.400-; un Mazda MX-5 2.0 con techo de lona vale 29.900-… ¡y que tiene 105 CV menos!; un Audi TT Roadster 3.2 V6 de 250 CV sale por 50.830-… Eso sí, resulta incomprensible que un coche como el GT sólo pueda tener dos airbags y que no no se ofrezca ni navegador ni climatizador en opción… |
El veredicto…Javi Villa |
¿Qué es un Opel GT?…Se trata de un roadster de dos plazas y techo de lona que se posiciona como el Opel más deportivo y radical del momento. Sólo se comercializa esta versión de 264 CV con un único nivel de acabado. |
A mano… y con maña… La capota se acciona manualmente: para ello, hay que soltar los enganches que quedan a la altura de los parasoles y y levantar la tapa trasera -tras los asientos- donde se oculta la lona que, aunque no es muy pesada, sí exige de cierta práctica, sobre todo, a la hora de ‘capotarlo’, ya que es fácil que no quede bien colocada, aumentando los ruidos aerodinámicos… y el riesgo de que se repliegue en marcha. |
¿Pitoniso?…El GT lleva unos sensores en el motor que, en función del número de veces que se ha arrancado el propulsor, de su temperatura y de la cantidad de chispas que emite la bujía -le permite saber las rpm a las que trabaja-, calcula el procentaje de vida del aceite motor y te la muestra en el ordenador |
Clones…Como Opel pertenece a General Motors, existen otros dos modelos con los que el Opel GT comparte plataforma: el Pontiac Solstice -que se ofrece con carrocería coupé y cabrio, y con el motor del GT o con un 2.4 de 173 CV- y el Saturn Sky -idéntico al GT, pero también con el motor 2.4 del Solstice-. Eso sí, ninguno de los dos se vende |