La publicación estadounidense Consumer Reports ha elaborado un informe que revela cuáles son los diez vehículos en los que menos confía la población de Norteamérica. La encuesta ha tenido en cuenta hasta 17 averías que pueden surgir en un coche, además de la gravedad de cada una de ellas. La puntuación final combina el resultado de estas pruebas con la satisfacción del propietario con su automóvil y los resultados de éste en materia de seguridad. La lista final es la siguiente:
Fiat 500L
Este modelo italiano tiene una suspensión demasiado rígida y sus asientos no sujetan el cuerpo como deberían. Además, la postura de conducción no es la idónea. En lo referente a fiabilidad, flojea en el tacto de la caja de cambios y en el apartado electrónico. Eso sí, es muy espacioso.
Ford Fiesta
El urbano de Ford es un coche manejable y divertido de conducir. Sus ajustes y niveles de calidad en el habitáculo son buenos. Sin embargo, el espacio en los asientos traseros no sobra y ha tenido problemas relacionados con el embrague, el tacto de la transmisión y la sonoridad interior.
Chevrolet Tahoe
Un interior lujoso y espacioso son las señas de identidad de este modelo, y aunque dispone de mucha tecnología y sistemas de ayuda a la conducción, el motor está falto de respuesta -a pesar de ser un 5.3 V8- y es muy ´gastón´ -13,1l/100km-. Además, es poco ágil. La electrónica y vibraciones en la dirección, otros de sus puntos flacos.
RAM 2500
Este pick up es pesado y rudo. Es muy poco eficiente -gasta 16,8l/100km de media- y su maravillosa practicidad se ve empañada por detalles como una altura de carga demasiado elevada, resultando incómodo. Al igual que el anterior, la dirección puede vibrar y también presenta problemas en la tracción 4×4.
Tesla Model X
El monovolumen/SUV eléctrico de Tesla es más vistoso que práctico. La apertura de las puertas traseras -se abren hacia arriba- es bastante lenta y si se escoge con tercera fila de asientos, ésta no se abate. Lo cierto es que es un coche muy rápido. Puede presentar problemas en la climatización y en la electrónica.
Chrysler 200
Es un coche mediocre en una categoría con muchísimas otras opciones mejores que elegir. Como si perteneciera a varias generaciones anteriores. Es muy torpe y tampoco es cómodo. Además, el motor es lento y los asientos traseros son claustrofóbicos. Al menos es fiable y silencioso.
Chevrolet Suburban
Tiene una capacidad de pasajeros y equipaje sorprendente, la última tecnología y una calidad de rodadura notable. Pero su motor 5.3 V8 gasta 14,7l/100km y la transmisión automática de ocho velocidades es algo brusca. La tracción 4×4 y el sistema electrónico pueden dar fallos.
Jeep Renegade
El aspecto de este pequeño crossover es muy atractivo. De hecho, ha dado un gran impulso comercial a la marca. Pero detrás de eso, su cambio automático es poco refinado y el pedal de freno vibra frecuentemente. Además, hace poco conocimos el grave problema del levantamiento de su zaga en las frenadas bruscas.
Ford Focus
Disponible como sedán, como hatchback y en versión eléctrica, el Focus americano es divertido de conducir por su agilidad. Sus materiales son de calidad, pero el espacio interior no sobra. El motor tricilíndrico 1.0 EcoBoost es lento. Puede presentar problemas en el embrague, en la vibración de la dirección o en la brusquedad de su caja de cambios.
Cadillac Escalade
No es un mal SUV de lujo pero se siente muy torpe al conducirlo. Además, no es especialmente cómodo y la tercera fila de asientos es muy estrecha. El sistema de infoentretenimiento es confuso. Su motor V8 de 420 CV tiene una gran respuesta. En general no es un coche fiable: el embrague, el cambio, la electrónica o la tracción 4×4 pueden dar dolores de cabeza.