Rodeo de acantilados, cruce de animales o marea tapando la vía, posibles situaciones

Carreteras de la muerte

Victor Delgado
Victor Delgado
Seguro que alguna vez, viajando con el coche, te has encontrado con unas condiciones climáticas extremas, o se te ha cruzado un perro por medio de la vía. Pues estos fenómenos son minucias comparados con la peligrosidad que entrañan la lista de "carreteras de la muerte" que hemos seleccionado a continuación. Mejor que las veas tras una pantalla.


¿Cuántas veces conduciendo has pensado que no podría hacer peor tiempo o que la carretera por la que vas tiene curvas un tanto peligrosas? Indudablemente, después de ver la lista de las siguientes carreteras, no volverás a maldecir tu suerte por ello. Son las más peligrosas del mundo y están dispersas por todo el globo. Lo mejor es que te pongas cómodo y disfrutes de sus datos y curiosidades desde el sofá de tu casa.

1. Pasaje de Gois (Francia)

Carreteras muerteAhora la ves, ahora no la ves. No hay expresión que mejor pueda definir a este camino de 4,5 kilómetros situado en la costa oeste de Francia. Quienes buscan adrenalina cruzan por esta carretera (hasta hace pocos años la única) que une la península francesa con la Isla de Noirmoutier, la cual se hunde en el océano Atlántico dependiendo de la hora a la que pases por ella. A pesar de haber carteles con las horas en las que cruzarla es viable, tienes postes de más de 4 metros para evitar tu hundimiento en caso de accidente, especialmente en la parte central, que es la que antes se inunda. Los lugareños aprovechan cuando se va el agua para recoger mejillones, almejas o cangrejos, y para la gente que apura demasiado el tiempo suele haber una comitiva de recibimiento y vítores por la hazaña. El Tour de Francia de 1999 la hizo famosa, al caerse muchos de los participantes debido a las algas que dejaba la marea.

2. Autopista Eyre (Australia)

EyreLa llanura de Nullarbor es una extensión enorme de terreno (unos 200.000 kilómetros cuadrados) sin naturaleza alguna más que piedra caliza, y une el oeste con el sur de Australia. Entre medias, para cruzar de un lugar a otro, se encuentra la autopista Eyre, un trazado basado en milimétricas rectas en la que la más larga llega a abarcar 145,6 kilómetros, distancia que separa las poblaciones de Balladonia y Caiguna. Construida 100 años después (en 1941) de que el explorador inglés Edward John Eyre recorriera el camino en 1841, se caracteriza por su poco tránsito humano y falta de servicios, existentes en tramos de más de 200 kilómetros. Unas aburridas y somnolientas rectas, una fauna considerable que cruza por la vía sin previo aviso o quedarte sin gasolina en un punto crítico, puede no tener solución. Como curiosidad, al ser prácticamente «fantasma», algunos tramos señalizados se utilizan para aterrizajes de emergencia de la «Royal Fliying Doctor Service».

3. Autopista James Dalton (Alaska)

James DaltonConstruida en 1974, esta vía de 667 kilómetros comienza en la autopista Elliot, en el centro de Alaska, para terminar cercana a la bahía de Prudhoe, completamente al norte del país y pegada al prácticamente helado océano Ártico. El aislamiento al que está sometida hace que en todo el trayecto solo se encuentren dos poblaciones mínimas, Coldfoot y Wiseman, de 10 y 14 habitantes respectivamente. Las previsibles heladas temperaturas causantes del hielo, las ventiscas y una visibilidad casi nula hacen de la Alaska Route 11 (su nombre formal) un lugar prácticamente intransitable. Es transitada en un gran porcentaje por valientes camioneros expertos en la tundra, que se encargan de abastecer las plataformas de extracción en Deadhorse, y cuya destreza al volante se ve recompensada hasta con 60.000 euros en cada temporada.

4. Avenida Winston Churchill (Gibraltar)

Carreteras muerteImagina un aeropuerto: paisaje despejado, asfalto hasta donde alcanza la vista, señalizaciones claras, etc. No aquí. El aeropuerto de Gibraltar convierte a su avenida Winston Churchill en una de las más peligrosas del mundo debido al riesgo de quedar aplastado por un avión. En este territorio británico en el que el espacio es tan angosto, no se han complicado a la hora de diseñar su avenida principal, la cual se ve cruzada en cada aterrizaje o despegue por diferentes aeronaves durante cualquier hora del día como si de un paso a nivel de una vía del tren se tratase. Así, sin importar que llegues tarde al trabajo o a una cita, el tráfico se ve cortado como mínimo 10 minutos cuando un avión pasa o está próximo a ello por su pista de aterrizaje-despegue de casi 2 kilómetros, repercutiendo sensiblemente en los atascos. Construida durante la Segunda Guerra Mundial, en la actualidad es el único aeropuerto de clase A con este inconveniente.

5. Autopista del Atlántico o Atlanterhavsveien (Noruega)

Carreteras muerteEntre las poblaciones de Karvag y Bud, al oeste de Noruega y cerca de Molde, se encuentra la autopista del Atlántico o Atlanterhavsveien, que consta exactamente de 8,3 kilómetros de infarto. Inaugurada en 1989, transcurre por los fiordos del oeste del país, y sus serpenteantes curvas y puentes sortean las acometidas del propio océano atlántico, especialmente salvaje en esa zona. De hecho, gracias a su práctica virginidad, por el camino se pueden avistar ballenas y focas con un poco de suerte. Aun con la peligrosidad que entraña, el camino fue declarado en 2005 «la construcción noruega del siglo» y reconocida como carretera turística nacional, lo que le ha llevado a contar con hasta cuatro miradores panorámicos y áreas de descanso (frecuentadas también por pescadores) con sus correspondientes obras arquitectónicas en contraste con la naturaleza acuática.

6. Carretera del Karakórum o del Himalaya (Pakistán y China)

Carreteras muerteLo más destacable de esta «carretera», destrozada en varios puntos, es su altura, 4.700 metros, y ser considerada la vía asfaltada más grande del mundo. La Karakórum Highway o KKH une las poblaciones de Rawalpindi (noreste de Pakistán) y Kashgar (oeste de China) a lo largo de 1.250 km, discurriendo por el lateral de los ríos Indo y Hunza. A pesar de haberse terminado hace solo 25 años, ya se considera una obra arquitectónica de similar calado a la Gran Muralla china o las pirámides egipcias debido a las dificultades que conllevaron su construcción por una orografía deficiente, con una estimación media de una muerte de un trabajador chino por cada tres kilómetros. Multiplica. Fue el camino utilizado por el montañero austríaco David Lama en su escalada al pico Masherbrum, de 7.821 metros de altura. Un paraíso natural que atraviesa las cordilleras más altas del mundo, como son Karakórum, Pamir, Hindu Hush e Himalaya, y que presenta una más que notable dificultad de paso.

7. Moki Dugway (EEUU)

Carreteras muerte52,5 kilómetros. Esa es la sinuosa distancia mide de principio a fin la Moki Dugway, al sur de Utah, en estado situado al centro-oeste de Estados Unidos. El trazado situado en la Ruta 261 está considerado uno de los más peligrosos del mundo por ser un camino de tierra que bordea la meseta Cedar Mesa, muy parecida al gran cañón, con peligrosas curvas sin pavimentar y desniveles que llegan al 11%, todo a una altura de más de 365 metros. El paso por ciertas zonas no es apto para cualquier vehículo, aunque hay un mirador que ofrece una impresionante vista del Valle de los Dioses. Su nombre, Moki (o Mokee), viene de la palabra «moqui», utilizada por los colonizadores españoles que en el siglo 18 nombraban así a los indios pobladores de la zona. Construida en la década de 1950 y cercano al Mexican Hat, la vía puede ser cerrada en cualquier momento por las nevadas, y no es raro ver coches accidentados «estacionados» en la base de los acantilados.

8. Carretera de la montaña Tianmen (China)

Carreteras muerteLa carretera se llama también autopista Big Gate y termina en la montaña Tianmen. Localizada en el centro-este de China y con 1.519 metros de altura, realmente no es una pista muy larga, pero sus 11 kilómetros se antojan muy complicados de cruzar. Comienza a 200 metros sobre el nivel del mar, y la estrechez de calzada y nula visibilidad pueden causar más de un susto… o accidente. Sin embargo, las 99 curvas que la componen (no al azar, escogido por ser el 9 el número que simboliza la suerte en China) no proponen únicamente una diversión continua, sino que te regalan una maravillosas vistas, diferente desde cada una de ellas y a cada cual mejor. Al final del camino hay un agujero natural en la montaña de más de 130 metros de altitud llamado «cueva de Tianmen», y el templo de la cima es digno de visitar, al que también se puede acceder por medio de teleférico de casi 7,5 kilómetros. Sin duda, un terreno no apto para cardiacos.

9. Paso de montaña Zoji La (India)

Carreteras muerteEn el norte de la India, para unir las localidades de Srinagar y Leh, se construyó este paso, parte de la autopista nacional 1 del país indio, que terminó de comunicar el territorio de Delhi con la ciudad de Attari, pegada a la frontera con Pakistán. Es uno de los más míticos e importantes de la India, y en su zona más alta llega a los 3.530 metros de altitud, pasando por la cordillera del Himalaya. Salvo excepción, se cierra durante el invierno, y su nombre originario fue paso de Zoji, ya que el «la» se le añadió tras la traducción al idioma del Himalaya. Sus 9 kilómetros son una conjunción de rocas y fauna local, que hacen que resalte más su impracticabilidad. Históricamente, es famosa por ser la ruta utilizada por el príncipe Rinchen Shah de Ladakh para llegar a Cachemira, para instalarse allí y convertirse en el primer rey musulmán de la región. Durante la guerra indo-pakistaní en 1947, asaltantes pakistaníes se apoderaron del paso para hacerse con Ladakh.

10. Carretera de Jalalabad (Afganistán)

Carreteras muerteConocida amigablemente como «desfiladero de la muerte», los peligros de esta carretera de 101 kilómetros ubicada al noreste de Afganistán no se ciñen únicamente a curvas de arena sin asfaltar sobre altas montañas, sino que esconden algo mucho más peligroso: las revueltas de los insurgentes y asesinos pakistaníes. Es esas condiciones falleció tristemente el periodista español Julio Fuentes, asesinado en este lugar en el año 2001. Puede decirse que en este paso la palabra muerte cobra mucho más sentido que en todos los anteriores, en donde el estado de la orografía (con ríos intermitentes, desierto, zonas secas y unas condiciones climatológicas muy deficientes) no es tan importante como que te explote una mina o una bomba bajo tu vehículo, o que tu vida dependa de que se le cruce un cable a uno de los exaltados que se encuentran protagonizando emboscadas y tiroteos. Sin límites de velocidad, carriles, ni policías que controlen sus oscuros túneles, el veredicto es claro: es la última carretera por la que iría.