Reportajes

House of Cars: Aquí también sabemos soñar

Eduardo Alonso
Eduardo Alonso
Existen muchos programas de televisión dedicados a restaurar coches clásicos, pero todos provienen de EE.UU. o de Inglaterra. House of Cars es el primero producido en España.


Desde su fundación hace 20 años, la dinámica de trabajo de la empresa M&M Clásicos ha sido la restauración de vehículos clásicos de todo tipo. Tal y como asegura José Vicente, gerente de la compañía, «ponemos la misma ilusión a la hora de revivir un modesto VW Escarabajo que un lujoso Jaguar E-Type o un muscle car estadounidense, aunque nuestra gran especialidad son los clásicos americanos».

Así era el día a día de M&M Clásicos hasta hace algo menos de un año, cuando José Vicente recibió una llamada de Discovery Max, la cadena de televisión española de la matriz Discovery Communications. Desde su nacimiento, en enero de 2012, Discovery Max emite programas procedentes de otras cadenas de Discovery Communications con el correspondiente doblaje al español pero, ahora, está reforzando la programación de producción propia.
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La idea que le propusieron a José Vicente era crear el primer programa español dedicado a la restauración de clásicos… y así nació House of Cars. No obstante, la dinámica del programa no es la misma que la de los espacios similares de origen estadounidense, puesto que no hay actores, ni trama, sino que se escenifica el día a día de la empresa. De hecho, la gente que sale en los capítulos son los verdaderos trabajadores del taller. Esa es la mayor peculiaridad de House of Cars; es decir, que no afecta al trabajo diario de M&M Clásicos, sino que se trata de una grabación de la pura realidad que se vive en un taller de restauración de clásicos.

De momento, han grabado los primeros cuatro capítulos en las instalaciones de M&M Clásicos en Quintanar de la Sierra, provincia de Burgos. Allí, José Vicente y su equipo disponen de una colección de cerca de 90 automóviles clásicos abierta al público para ser visitada en lo que ellos llaman una ´Feria permanente de coches clásicos´: «No sólo restauramos los vehículos que nos traen nuestros clientes, sino que también hay muchos que compramos nosotros mismos para recomponerlos. Después, algunos salen a la venta, otros los alquilamos para eventos y otros, simplemente, nos los quedamos para nuestra exposición», cuenta José Vicente. House of Cars se emite los domingos a las 22:00 horas en la cadena Discovery Max.

José Vicente Díez

¿De quién fue la idea del programa? «De Discovery Max, inicialmente yo no tuve nada que ver. Es más, cuando me eligieron para el proyecto, no me atrajo mucho la idea, puesto que temía que afectara a mi vida personal y profesional. Pero, según pasaron los acontecimientos, el plan fue cada vez gustándome más y ahora tengo mucha ilusión por el programa».
Ha habido otros programas españoles del motor... y pocos han tenido éxito¿Por qué House of Cars? «El nombre del programa también fue cosa de Discovery Max. Me visitaron, vieron que este lugar es como mi casa, y decidieron que House of Cars sería un buen nombre».
¿Cómo comenzaste en este mundo? «Fue hace 20 años. Yo tenía un buen puesto de trabajo como ejecutivo en una multinacional, pero me aventuré a dejarlo todo por mi pasión y construir esta empresa de restauración de automóviles clásicos».
Ha habido otros programas españoles del motor… y pocos han tenido éxito, ¿qué aporta House of Cars para desmarcarse de ellos? «Realizar un programa como este en España no es fácil, porque aquí no tenemos la cultura automovilística que existe en el Reino Unido o en EE.UU. No obstante, somos profesionales de primer nivel en la restauración de vehículos y, si a eso le sumamos el despliegue tecnológico de grabación que ha aportado Discovery Max, creo que el resultado está siendo muy bueno. A la gente le gustará».
¿Cómo competir contra programas extranjeros asentados como Joyas Sobre Ruedas, Overhaulin’ o Fast N´ Loud? «No queremos competir contra ellos, ni tampoco compararnos porque nosotros hacemos algo diferente. Aquí no hay actores, ni presentadores, ni tomas falsas, simplemente nos graban mientras trabajamos. Lo que la gente va a ver es el verdadero día a día del taller. Además, nosotros valoramos más el factor humano, ya que contamos las cosas con mucha minuciosidad, aparecen los dueños de los coches en los episodios, hay historias que se entremezclan… No tenemos ningún complejo por no ser americanos o británicos, es más, creo que nuestro programa es único y que no ha existido otro igual. Esto es real, nadie actúa».
¿Cómo ves el mercado de los clásicos en España? «Muy difícil. No existe tanta pasión por ellos como en EE.UU. y, además, también les perjudica la crisis económica, pues se trata de coches que consumen bastante carburante. Pero, en realidad, el verdadero escollo es la administración española, que es muy restrictiva con estos vehículos».
¿Cuáles son tus clásicos preferidos? «Muchos, pero sobre todo el Buick Riviera Boat-tail de 1972 y el Cadillac Coupé de 1959. Tengo la suerte de poseer una unidad de cada uno de ellos».
Y a diario conduces? «Alguno de mis clásicos, aunque tengo un coche moderno pero, por supuesto, americano: un Ford Mustang de quinta generación».
 

José Vicente Díez

«Siempre digo que el automóvil moderno ha perdido parte de ese ‘espíritu’ que le hacía una herramienta de disfrute antes que una máquina meramente práctica. Es una de las razones por las que creé este negocio»