Rincones todoterreno

Espinama, Cantabria: A los pies de los Picos de Europa

Salvador Hernández
Salvador Hernández
Que Cantabria es una de las regiones de España con un entorno natural mejor conservado no es precisamente un secreto. Montaña, playa y kilómetros de naturaleza en estado puro se dan la mano. Localidades como Espinama, a los pies de los Picos de Europa, ejemplifican a la perfección esta agradable mezcla.


Cocido montañés
QUÉ COMER

La gastronomía de toda la comarca es eminentemente tradicional. Gracias a la ganadería, multitud de sus platos típicos tienen como ingredientes los embutidos y los productos derivados del cerdo y del cordero. Así, son buena muestra de su gastronomía los boronos (elaborados con sangre y manteca de cerdo, así como con pan cebolla y perejil), los merdosos (con sangre de cerdo, harina, huevo y sal) y el cocido lebaniego (con tocino, chorizo, cecina, patatas y berza) y los dulces como los frisuelos.
Gracias a la creciente actividad turística, son cada vez más los establecimientos en los que se pueden degustar sus platos típicos. Entre ellos destacan:

Hórreo tradicional en Espinama, Cantabria

Tanto la cultura como la propia historia de este enclave están marcados precisamente por las montañas. Tanto es así que la tradición minera es innegable gracias a las minas de Áliva, aunque desde hace unos años se encuentran clausuradas por su falta de rentabilidad.
La historia de Espinama es milenaria.

Para encontrar su primera mención es necesario remontarse al año 930, momento en el que se escribe el Cartulario de Santo Toribio de Liébana.

Aunque durante la Edad Media no aparecen excesivas menciones a esta localidad, los pocos documentos existentes apuntan a la importancia de la ganadería vacuna, a un exceso de pobreza entre sus habitantes y a una gran dependencia respecto al Monasterio de Santo Toribio.

Ya en la invasión francesa, Espinama lograría cierta importancia en la comarca al contar con un hospital y un almacén del ejército guerrillero en su territorio.

Si entonces la emigración resultó uno de los elementos más significativos en lo que a su población se refiere, esta tendencia se ha mantenido durante toda la historia a pesar de su creciente infraestructura: la carretera que comunica con Potes, el teleférico de Fuente Dé y el Parador Nacional de Turismo.

El turismo rural es, en la actualidad, uno de los puntos fuertes de esta región.

Una de las actividades más populares en este sentido son las rutas todoterreno, que parten de Espinama en distintas direcciones.

Una de las más populares es la que une esta localidad con Mogroviejo, y que en apenas 13 km alterna flora y fauna (la presencia de los cuervos es una constante). Algo más larga, con 55 km, es la ruta que une Espinama con Tresviso, y que tiene al desfiladero de la Hermida como principal protagonista.

¿QUÉ VER EN ESPINAMA?

Esta localidad cuenta con multitud de atractivos a pesar de no ser de las más grandes de la región. Entre ellos destacan:

  • Ermita de la Virgen de la Salud: Datada en 1946, sustituye a la dedicada a San Pedro Advíncula (1851).
  • Iglesia de Espinama, del siglo XVII.
  • Casona de la Obra Pía, fundada en el siglo XVIII y que cuenta con los escudos de armas de Noriega y de Cosgaya como elementos más atractivos.
  • Hórreos tradicionales, elaborados en madera y con cuatro o seis postes terminados en pirámide truncada.

Parador Nacional Fuente Dé. Tel. 942 736 651
Casa Máximo. De estilo rústico y especializada en cocido lebaniego, también organiza rutas todoterreno en la zona. Tel. 942 736 603
Posada Sobrevilla. Especializada en cocidos lebaniego y montañés, destaca también por sus carnes y postres caseros. Tel. 942 736 669
Casa Vicente Campo. Las carnes y los cocidos son sus principales atractivos. Tel. 942 736 658
Restaurante Nevandi. Destaca por su decoración tradicional y por sus platos elaborados con carnes de la región. Tel. 942 736 608

Vista de Espinama (Cantabria)