El sector de la caza es un negocio que mueve al año en España más de 4.000 millones de euros. Según AEA -Automovilistas Europeos Asociados-, desde este ´lobby´ se habría ejercido presión para tener más privilegios en sus prácticas y ser beneficiados en la última modificación de la Ley de Seguridad. Así lo aclara también el Tribunal Supremo, que afirma que, a partir de ahora, los automovilistas no tendrán derecho a ser indemnizados en accidentes en los que estén implicados animales de caza.
Hasta el momento, en este tipo de sucesos los tribunales de justicia estudiaban cada caso detalladamente para determinar si las víctimas recibían o no una compensación económica, decisión que ya ha quedado obsoleta, pues en el 100% de los casos el conductor accidentado quedará desamparado. De hecho, los siniestros de esta naturaleza han aumentado con el paso de los años, produciéndose un total de 1.015, los cuales quedan distribuidos en 177 en 2011, 257 en 2012, 304 en 2013 y en 2014 se redujeron levemente al haber 277 accidentes con animales de caza.
Además, el informe elaborado por AEA revela que el 77% del territorio español está calificado como terreno cinegético, con 30.371 espacios que ocupan 40.030.978 hectáreas. Entre 2005 y 2014, la contratación de seguros de responsabilidad civil por daños o accidentes provocados por animales costó a los dueños de los cotos aproximadamente 45 millones de euros, unos 1.500 por cada uno.
En relación a los territorios con más siniestros de esta índole, en Castilla y León es donde más víctimas se producen -331-, seguida de Galicia -141- y Andalucía -100-. Por otro lado, en los meses de noviembre -114-, diciembre -105- y enero -103- es cuando más se producen, siendo el jabalí -61%- el animal que tiene mayor presencia en los accidentes con víctimas, seguido del corzo -17%- y el ciervo -8%-.
Por todos estos motivos, la AEA se dispone a solicitar al Parlamento una urgente modificación de la Ley de Seguridad Vial y de la recientemente aprobada Ley de Seguros, para que ninguna víctima implicada en un accidente de tráfico con animales de caza quede indefensa.