Vídeo: Subaru Forester 2.0i Hybrid 2025 | El más duro de los SUV

El Subaru Forester siempre se ha caracterizado por ser un SUV capaz de desenvolverse en situaciones difíciles y, al mismo tiempo, conservar cierto confort en asfalto. En esta sexta generación, la marca japonesa mantiene la apuesta por la fiabilidad y la robustez, dos aspectos muy valorados en mercados donde las condiciones climáticas y del terreno pueden llegar a ser extremas.

Su sistema híbrido e-Boxer y la tracción total permanente Symmetrical AWD hacen del Forester un modelo único en su categoría, especialmente si lo comparamos con otros SUV híbridos del mercado que optan por soluciones más enfocadas a la eficiencia pura. Sin embargo, eso no significa que el Forester no ofrezca avances tecnológicos; de hecho, incorpora sistemas de asistencia a la conducción tan interesantes como EyeSight, que cuenta ahora con una cámara gran angular y un radar en adición a las tradicionales cámaras estereoscópicas, para mejorar su precisión.

A lo largo de esta toma de contacto, hemos puesto a prueba las prestaciones, la habitabilidad y el equipamiento de un vehículo que, a pesar de no ser el más económico ni el más eficiente del segmento, destaca por su amplitud, fiabilidad mecánica y un comportamiento muy sólido fuera del asfalto.

Exterior

El diseño exterior del Forester 2025 mantiene un aspecto algo cuadrado, lo que no solo favorece una excelente visibilidad desde el puesto de conducción, sino que también contribuye a ofrecer un habitáculo amplio y luminoso. Mide 4,67 m de largo, 1,83 m de ancho y 1,73 m de alto, unas dimensiones que lo sitúan en la zona intermedia del segmento SUV.

La altura libre al suelo es de 220 mm, una cota superior a la mayoría de rivales, y claramente enfocada a un uso offroad moderado. Además, la última evolución de su parrilla y grupos ópticos frontales mejora la imagen delantera respecto a generaciones previas. A pesar de requerir tres cámaras, el sistema Eyesight está cuidadosa y discretamente integrado en la parte superior del parabrisas.

En la parte posterior, el enfoque práctico sigue presente: el portón da acceso a un maletero de 510 litros, ampliables hasta 1.720 litros si abatimos los asientos traseros, lo que confirma la buena habitabilidad y la facilidad de uso en el día a día. Es justo decir que Subaru cuida especialmente este apartado, consciente de que su cliente tipo demanda un coche versátil y con espacio de sobra para equipaje y objetos de ocio.

Técnica

Una de las claves de este modelo es su mecánica híbrida de gasolina. El motor principal es un 2.0 boxer de 136 CV y 182 Nm de par, que se sitúa en posición delantera longitudinal. A él se suma un propulsor eléctrico de 17 CV y 66 Nm, alimentado por una batería de iones de litio de 0,57 kWh.

La potencia combinada efectiva de la versión e-Boxer se sitúa alrededor de los 153 CV aunque, de cara a hacerse una idea de la respuesta real, es mejor considerarlo como un coche de 136 CV con un cambio bastante competente. Este sistema está gestionado por una caja de cambios Lineartronic de variador continuo, apoyada en un convertidor de par, una solución que otorga suavidad en la entrega de potencia, especialmente en entornos offroad o con superficies deslizantes.

La tracción Symmetrical AWD, de tipo permanente, reparte el par de forma constante a las cuatro ruedas. Esto descarga a la electrónica de un esfuerzo excesivo, lo cual incrementa la fiabilidad en tramos difíciles o cuando se conduce de forma continuada sobre nieve, barro o pistas de tierra. Como contrapartida, el Forester registra un consumo medio WLTP de unos 8,1 l/100 km y unas emisiones de CO₂ de 183 g/km, cifras algo elevadas para un SUV híbrido en el panorama actual.

Interior

El habitáculo del Forester busca la durabilidad y la resistencia, sin renunciar a comodidades como una pantalla central de 11,9 pulgadas. Esta sustituyó la pantalla superior de la generación anterior, integrando información relevante del vehículo y mejorando la conectividad.

Los asientos resultan amplios y confortables, con un tapizado que ofrece la sensación de aguantar bien el paso del tiempo y un uso intensivo. El cuadro de instrumentos mantiene cierta sobriedad, pero Subaru ha añadido la cámara de supervisión del conductor, capaz de advertir sobre la falta de atención en la conducción y de reconocer perfiles de usuario para ajustar reglajes y memorias.

Mención aparte merecen los espacios de carga y la sensación de amplitud, favorecida por superficies acristaladas generosas y por la carrocería “boxy”. Además, la visibilidad resulta excelente, un rasgo poco habitual en SUV con líneas más deportivas y ventanas laterales más pequeñas.

En marcha

Durante nuestro recorrido, el Forester 2025 ha demostrado que el ajuste de la suspensión filtra con solvencia las irregularidades, aunque en asfalto no es tan ágil como un SUV con un centro de gravedad más bajo. En cualquier caso, el control de la carrocería es correcto, y el confort en viaje, notable.

Cuando hablamos de prestaciones, el Forester se mueve con fluidez en la mayoría de situaciones, siempre y cuando no le exijamos unas aceleraciones fulgurantes. La aceleración de 0 a 100 km/h en 12,2 s y la velocidad máxima de 188 km/h dejan claro que no es un coche de planteamiento deportivo, sino un todocamino robusto y equilibrado.

Fuera del asfalto, la combinación de la tracción total permanente y el sistema híbrido e-Boxer permite una motricidad muy fiable, sobre todo si las condiciones se complican. El elevado despeje al suelo (220 mm) y el buen recorrido de suspensión garantizan aptitudes camperas que justifican la fama de Subaru en mercados con climas extremos.

La opinión de Autofácil…

En líneas generales, el Subaru Forester 2025 sigue representando una alternativa exótica en el segmento SUV, más cercana a un uso 4×4 real que a la eficiencia o el diseño llamativo. Sus consumos no son los más bajos de la categoría, pero compensa esta limitación con una mecánica robusta y un comportamiento muy seguro en condiciones adversas.

Creemos que este Forester es especialmente atractivo para quienes valoran la durabilidad y necesitan un vehículo fiable en escenarios difíciles. Para el resto, existen opciones más livianas y eficientes, aunque ninguna con la combinación de solidez, tracción AWD permanente y sencillez mecánica que ofrece este Subaru.