Suzuki Vitara DDiS GLX 4WD: Prueba

La quinta generación del Suzuki Vitara es un modelo compacto -4,17 m de largo- pero habitable, disponible con una única carrocería de cinco puertas, que guarda cierto parecido con las líneas cuadradas de los modelos precedentes, si bien abandona la rueda de repuesto colgada del portón, que ahora tiene las bisagras en el techo, en lugar de en un lateral de la carrocería. De hecho, la rueda de repuesto no es lo único que desaparece, ya que tampoco dispone de reductora***, y la tracción total ni siquiera es de serie -cuesta 1.800 euros más-, aunque sí resulta muy recomendable, ya que apenas supone un incremento de 0,2 litros cada 100 km en el consumo medio, aporta un plus de seguridad activa y nos permite salir por caminos embarrados o circular por carreteras nevadas con mayores garantías que con la versión de tracción delantera.
Tecnología ‘de mayores’
En las versiones GLX hay elementos de equipamiento propios de vehículos de segmentos superiores, como el acceso y arranque sin llave o el control de crucero adaptativo. Este elemento funciona mediante un radar, que mide constantemente la distancia con el vehículo que nos precede y reduce nuestra velocidad para que no lo alcancemos; funciona muy bien y va acompañado de un sistema que nos alerta ante una posible colisión -si detecta que el vehículo que va delante circula más despacio y nosotros no frenamos-.
Sorprendente habitabilidad
El habitáculo es bastante amplio para la longitud exterior y, sobre todo, teniendo en cuenta que la distancia entre ejes es relativamente pequeña. El acabado GLX cuenta con una tapicería muy agradable de terciopelo sintético y cuero.
Las plazas delanteras son cómodas, y el volante puede regularse en profundidad, pero este reglaje tiene poco juego.
Detrás encontramos bastante espacio, aunque el suelo no es plano, por lo que el ocupante de la plaza central tendrá que acomodar sus piernas entre el túnel de la transmisión.
La zona destinada a la carga ofrece una capacidad razonable -375 litros-, con un amplio hueco debajo del piso y otro espacio donde se guarda el kit de reparación de pinchazos. La rueda de repuesto no se ofrece ni como opción, pero se podrá adquirir como accesorio de concesionario -aproximadamente unos 200e-.
Así va el Suzuki Vitara DDiS GLX 4WD
EN CAMPO: La carrocería no está muy protegida. Por su parte, el desarrollo de la primera es muy largo -10,20 km/h a 1.000 rpm-, por lo que se echa en falta la reductora. El control de descenso en pendientes tampoco es eficaz.
EN CIUDAD: Su tamaño compacto es ideal para entornos urbanos, sin que ello nos obligue a renunciar a una buena accesibilidad a las plazas traseras.
EN CARRETERA: Los desarrollos del cambio son muy largos, pero el comportamiento es bueno, mucho más cercano al de un turismo que al de un todo terreno.
EN AUTOPISTA: Con un consumo de récord, buena insonorización y control de crucero activo, es muy superior a su predecesor en este terreno.
Los rivales del Suzuki Vitara DDiS GLX 4WD
- Precio: 17.040 euros
- Potencia 90 CV
- Velocidad máxima 160 km/h
- Consumo 4,6 l/100 km
- Tamaño 427 x 177 x 164 cm
No dispone de versiones de tracción total, pese a que su estética es más todo terrenera.
Lo mejor: Altura libre -20 cm-, rueda de repuesto normal.
Lo peor: Tracción delantera, motor poco potente.
RENAULT CAPTUR DCI

- Precio: 20.610 euros
- Potencia 110 CV
- Velocidad máxima 175 km/h
- Consumo 3,7 l/100 km
- Tamaño 412 x 178 x 157 cm
Aparte del motor de 90 CV, ahora hay un diésel de 110 CV, más adecuado para uso por carretera.
Lo mejor: Plazas traseras amplias, viene bien equipado.
Lo peor: Sólo versiones con tracción delantera.

CITROEN C4 CACTUS HDI

- Precio: 16.750 euros
- Potencia 100 CV
- Velocidad máxima 184 km/h
- Consumo 3,4 l/100 km
- Tamaño 416 x 173 x 148 cm
Se fabrica en España y ofrece buenas prestaciones con un consumo muy bajo.
Lo mejor: Consumo, prestaciones y habitabilidad.
Lo peor: Pantalla táctil de manejo ‘lioso’.