Los vehículos equipados de Stop&Start se caracterizan, entre otras cosas, por contar con baterías de mayor capacidad que las de otros coches sin este sistema, para poder arrancar el motor tantas veces como sea necesario. Hasta ahí, nada debería impedir que cambiar la batería de un coche así fuese algo especialmente complicado.
Sin embargo, la realidad es bien distinta. En la práctica y en condiciones normales, la centralita electrónica que gestiona el Stop&Start recibe multitud de informaciones para saber si puede o no detener el motor automáticamente. Por ejemplo, depende de la temperatura a la que esté el propio motor, pero también de la temperatura exterior, de si está o no funcionando el sistema de climatización, de la carga de la batería en cada momento, de la cantidad de sistemas electrónicos que necesiten alimentación en ese instante…
Baterías de coche: consejos para comprarlas y que sean duraderas
Así, es fácil comprender que la centralita, una vez que se sustituya la batería, necesite resetearse para saber que ahora hay una nueva batería. Y esto, en la mayoría de los casos, hay que hacerlo conectando un terminal de diagnosis al coche para informarle de que se ha realizado la sustitución de la batería.
Es cierto que hay modelos, como algunos Renault, en los que ese reseteo se puede hacer a través del propio ordenador de a bordo del coche y que están fácil como decirle que sí se ha sustituido la batería cuando nos pregunte si lo hemos hecho, pero lo normal es que todo este proceso sea más complicado. En muchas ocasiones, también se puede resetear realizando diferentes pasos utilizando los mandos del coche en una secuencia determinada. Y, aun así, en muchos casos es necesario hacerlo con un terminal de diagnosis.
¿Qué ocurre si no se realiza este reseteo? En muchos casos, el coche podrá arrancar, pero el sistema Stop&Start no funcionará correctamente y se quedará encendido el testigo del cuadro hasta que se resetee convenientemente en un taller.
Por eso, en caso de quedarnos sin batería en un coche de este tipo, es muy probable que tengamos que acudir al taller para sustituirla. Por otro lado, y dada la cantidad de elementos electrónicos que, cada vez más, tienen los coches, es recomendable no manipular la batería o conectar unas baterías para arrancar el coche si no se tienen un mínimo de conocimientos para evitar pequeños picos de tensión o chispazos que puedan dañar alguna de las centralitas del vehículo.