Toyota Yaris Cross 2020: estos son sus rivales (primera parte)

Rogelio Camargo
Rogelio Camargo

El Yaris Cross, la apuesta de Toyota en el segmento SUV-B, va a tener que enfrentarse a toda una legión de rivales. Aquí te traemos una primera selección de cuatro alternativas.


Basta con echar un vistazo a nuestra guía de precios para comprobar que el segmento de los todocaminos urbanos (conocido como SUV-B) es, en la actualidad, el más poblado del mercado. Tanto, que para elaborar este listado de rivales hemos puesto como tope los 4,25 metros de longitud (el Yaris Cross se queda en 4,18 metros), de modo que han quedado fuera alternativas como el Fiat 500X (4,26 metros), el Mazda CX-3 (4,28 metros) o el mismísimo Peugeot 2008, que alcanza los 4,30 metros.

Incluso aplicada esta restricción, en la lista de rivales del Toyota Yaris Cross hay nada menos que 16 posibilidades. Y dada que nuestra intención era sólo escoger ocho modelos, de nuevo hemos tenido que dejar a muchos; por ejemplo, Jeep Renegade, Kia Stonic, Opel Crossland X o el Skoda Kamiq, por citar solo algunos.

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Citroën C3 Aircross

Fotos de la prueba del Citroën C3 Aircross

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El Citroën C3 Aircross es un modelo de fabricación nacional (en la factoría de Figueruelas, en Zaragoza, junto con el Opel Crossland X), que mide 4,15 metros de longitud (3 cm menos que el Yaris Cross) y que sobresale por ofrecer unas amplias posibilidades de personalización de la carrocería (techo y las carcasas de los retrovisores en color de contraste, por ejemplo). También es destacable que ofrece una amplia gama cromática, con ocho posibilidades a elegir (una gratuita y el resto, entre 200 y 450 euros). La oferta de acabados no es tan completa como en otros rivales, con tres opciones: Live, C-Serie y Shine.

Por dentro, el Citroën C3 Aircross vuelve a brillar con luz propia. Es de los mejores por habitabilidad, en especial por altura y anchura en las plazas traseras, y tiene una banqueta trasera desplazable que permite dar prioridad al espacio para las piernas de los pasajeros posteriores o la capacidad del maletero, que oscila entre 410 litros y unos excelentes 520 litros. Eso sí, en lo que respecta a la calidad, se encuentra algo por debajo de la media, con algunos materiales de aspecto y tacto mejorable.

En cuanto a la gama de motores, no hay opción híbrida como en el Yaris Cross, aunque las mecánicas disponibles sobresalen por su buen rendimiento. Tanto el gasolina 1.2 PureTech de 110 CV como el diésel 1.5 BlueHDI de 100 CV son más que suficientes para todo uso, aunque para hacer frente a la eficiencia del Yaris Cross, habría que optar por el diésel. En ambos casos, la caja de cambios es manual de seis velocidades.

En marcha, el C3 Aircross presenta una suspensión muy blanda que le resta agilidad frente a otros rivales. Tampoco sobresale en precisión de la dirección o en los frenos, aunque lleva discos en el eje trasero, algo que no es del todo habitual.

Ford Puma

Con 4,19 metros de longitud, el Ford Puma es uno de los rivales más directos que tendrá el Yaris Cross, puesto que sus motores con microhibridación (dos de las tres versiones disponibles) disfrutan de las ventajas de la etiqueta Eco. Otra peculiaridad que presenta es que su apariencia le sitúa más cerca de un turismo que de un SUV al uso (por ejemplo, el C3 Aircross), debido a que sólo mide 1,54 metros de altura, es muy ancho (1,81 metros) y el techo tiene una caída acusada en la parte posterior. La oferta de acabados contempla tres opciones: Titanium, ST-Line y ST-Line X.

El habitáculo del Puma presenta una buena calidad de acabado, equiparable a la de un Focus, y una buena ergonomía en general. Las plazas delanteras están en la media del segmento por espacio e incorporan de serie un elemento poco habitual: la función de masaje tanto para el conductor como para el acompañante. Sin embargo, las plazas traseras no son amplias, sobre todo en lo referente a la altura. En cuanto al maletero, tiene 456 litros, salvo en las versiones microhíbridas, que pierden 55 L. Eso sí, conservan el doble fondo (Ford lo denomina Megabox) donde cabe sin problemas una maleta de cabina de avión.

La gama de motores es escasa en relación a la competencia, pues hay un único bloque 1.0 EcoBoost de tres cilindros, con 125 y 155 CV. Ambas versiones cuentan con microhibridación (el de 125 CV puede elegirse sin ella) y una caja de cambios manual de seis velocidades. A lo largo de 2020 llegará una caja automática de ocho velocidades para el 125 CV sin hibridación y un diésel 1.5 TDCi de 120 CV.

En el aspecto dinámico, el Puma es una de las referencias: ágil, con una dirección precisa, un cambio rápido… No en vano, está creado sobre la plataforma del Fiesta, uno de los mejores utilitarios en este sentido. ¿Lo malo? El consumo en las dos versiones está por encima de la media, y no es sencillo bajar de 7 L/100 km en conducción normal.

Hyundai Kona

Si hay que nombrar al mayor rival del Yaris Cross, ese es el Hyundai Kona. ¿Por qué? Principalmente, porque tiene unas proporciones muy similares (4,17 metros de largo) y es el único que dispone de una versión híbrida equiparable, aunque con mayor potencia (141 CV frente a los 115 CV del Yaris). Además, también ofrece la posibilidad de escoger una variante con tracción a las cuatro ruedas y cuenta con una amplia oferta de acabados: Essence, Klass, SLE, Tecno, XLE y Style.

Por dentro, el Kona no sobresale en ningún aspecto, pero tampoco está entre los peores en nada. Si acaso, se le podría criticar que su maletero se queda en 361 litros, aunque probablemente el Yaris Cross tendrá una capacidad semejante. Cabe destacar que las versión híbrida no pierde capacidad; sí lo hace el Kona eléctrico, que se queda en 332 litros.

La oferta mecánica es muy amplia; al híbrido, el eléctrico (disponible a su vez con dos versiones, con 136 y 204 CV) y el 1.6 T-GDI de 176 CV, se suma otro gasolina 1.0 T-GDI con 120 CV y dos diésel 1.6 CRDI, con 115 y 136 CV. Este último, junto con el gasolina de 176 CV, pueden contar con la tracción a las cuatro ruedas en unión con una caja de cambios automática de doble embrague y siete velocidades.

En marcha, el Kona resulta un tanto aséptico, aunque con el paso de los kilómetros acaba convenciendo por su buena relación entre estabilidad y confort y por el buen tacto general de todos los mandos. El híbrido muestra un funcionamiento agradable, aunque no resulta tan eficiente como promete ser el Yaris Cross.

Nissan Juke

El Nissan Juke ha sido durante muchos años uno de los reyes del segmento, hasta el punto de que el modelo primigenio estuvo en el mercado, sin apenas cambios, durante casi una década. La segunda generación está a la venta desde septiembre de 2019 y ha mejorado de manera más que notable en todos los aspectos, aunque mantiene una línea estética semejante y ha crecido hasta los 4,21 metros.

El habitáculo del Juke ha sido uno de los beneficiados del aumento de tamaño, y ahora presenta unas plazas traseras decentes. También ha crecido el maletero, que con 422 CV está por encima de la media del segmento. Otra mejora notable la encontramos en la calidad de acabado, mientras que el diseño resulta más sobrio que en el anterior, aunque con una distribución más lógica de los mandos.

En la parte mecánica, el Juke pierde bastantes de los puntos ganados hasta ahora, más por cantidad que por calidad. El único motor disponible de momento es un 1.0 DIG-T con 117 CV que, eso sí, puede escogerse con cambio manual de seis velocidades o con una caja automática DCT de siete relaciones. La gama de acabados también es amplia: Acenta, N-Connecta, Tekna, N-Design Chic y N-Design Active.

En marcha, el Juke presenta una suspensión tirando a dura que beneficia el dinamismo y no lo hace especialmente incómodo. Está bastante bien insonorizado y el motor presenta una relación prestaciones-consumo razonable, aunque no es fácil bajar de 7 L/100 km en conducción normal.

 

Ford Puma