Julia García: «Me siento orgullosa de haber sido una de las primeras mujeres gerente de un concesionario en España»

Nicolás Merino
Nicolás Merino

Julia García Alfaro es una de las primeras mujeres en España que ocupó la gerencia de un concesionario. En 1990 tuvo la oportunidad de ser gerente de Seat, Audi y Volkswagen.


Quería estudiar en Madrid, pero sus padres no le dejaron salir de Albacete, donde ha desarrollado su larga y exitosa carrera profesional. Julia García Alfaro se retira con 61 años como gerente de las marcas Audi y Volkswagen en Wagen Motors.

Tras 46 años vinculada al mundo del automóvil, Julia asegura que nunca ha dejado de aprender. «Este es un sector muy dinámico en el que hay que esforzarse para estar al nivel que te piden las marcas. Un sector apasionante, que yo he vivido con mucha pasión».

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Julia ha recibido un merecido homenaje de la marca Volkswagen en un encuentro al que asistieron el resto de gerentes de la red de Volkswagen junto a Laura Ros, directora de la marca en España. «Julia es un ejemplo de tesón, firmeza y entrega. Un ejemplo de lealtad a la marca y del papel que jugáis los concesionarios. Nuestro éxito es la suma de vuestro esfuerzo. Gracias, Julia, por todos estos años de colaboración», declaró.

Una historia de esfuerzo y tesón

Transcurrían los primeros años de la década de los 70. Con sólo 15 años, Julia comenzó a compaginar sus estudios con unas prácticas en el Grupo Torrecillas, en el departamento de administración. Su fundador, el empresario Manuel Torrecillas Sorio, era amigo de su padre, con quien compartía su pasión por los coches.

De naturaleza inquieta y curiosa, Julia superó con éxito las prácticas y continuó en el grupo, del que nunca más se desvinculó. En aquel entonces comercializaban marcas como Derbi, Vespa o Kawasaki, también vendían tractores y camiones, así como todos los modelos de Seat y Skoda. Durante los siguientes años Julia fue asumiendo nuevas responsabilidades hasta llegar a ser jefa de Administración. Mientras tanto, la compañía comenzó a desprenderse de algunas actividades y enfocó el negocio únicamente en el automóvil.

En 1990, a la albacetense le ofrecieron ser gerente de las firmas Seat, Audi y Volkswagen. Entonces las marcas se llevaban de forma conjunta, más tarde se separó la gerencia de la marca española. En ese momento, Julia ya estaba casada y acababa de tener su primera hija. Ahora recuerda perfectamente el momento en que le ofrecieron este reto: «Yo era muy joven. Tenía 30 años y Manuel Torrecillas nos reunió al equipo directivo -todos hombres y mayores que yo- para decirnos que yo sería la próxima gerente. En un primer momento dije que no, creía que había otras personas con más experiencia. Pero Manuel insistió en su decisión», explica Julia.

Julia rememora esa época «como complicada, durante muchos años yo era la única mujer en el grupo. Mis compañeros no me lo pusieron fácil, aunque tengo que decir que siempre he tenido mucha ayuda por parte de las marcas», añade.

Actualmente, cree que ya no existen las barreras que ella tuvo que superar. «Tenemos el ejemplo de mis compañeras -la red de Volkswagen cuenta con 12 mujeres gerentes-. Y tengo el ejemplo de mis hijas, Marta y Sandra, de las que me siento profundamente orgullosa. La primera tiene doble titulación en Ingeniería y la más pequeña es médico», añade Julia.

Confianza ante todo

Asegura que sin el apoyo de su familia, no habría sido posible llegar hasta donde ha llegado. Y se enorgullece también de haber contado siempre con la confianza de los clientes. Porque a pesar de ser una persona tímida, le gusta mantener un trato muy cercano con ellos. «Tengo clientes desde hace más de 30 años que son más que amigos. La confianza tiene que ser la base de la relación con los clientes», asegura la directiva.

Julia, que ha vivido momentos muy complicados en la industria del automóvil, asegura que en «este sector no te puedes dormir. Hemos visto cambios muy profundos pero ninguno como al que nos estamos enfrentando ahora. La electrificación supone todo un reto para las marcas y su red de concesionarios».

De su estilo de liderazgo, destaca que siempre se ha sentido una más del equipo. «Me he involucrado hasta el final, me he remangado con ellos, con todos los departamentos, comercial, talleres, administración… He sido una más», alude. Ahora, después de más de 45 años dedicados al automóvil, espera disfrutar de su familia y de su madre. «Y cuando llegue el invierno, ya veré», asegura dejando una puerta abierta a nuevos proyectos.