¿Sabías que hace 60 años existió un Seat 600 de cuatro puertas? Se llamaba Seat 800 y fue idea de la marca española como alternativa a la no fabricación bajo licencia del Fiat 600 Multipla. De hecho, el Seat 800 no tuvo homólogo en Fiat. Literalmente, el Seat 800 era un Seat 600 cortado por la mitad, alargado y provisto de dos puertas extra que le proporcionaban un más cómodo acceso a unas plazas posteriores que resultaban mucho más amplias que las del 600 en espacio para las piernas (que no en anchura ni en altura, que eran las mismas). Procedamos a contarte cómo nació este clásico. Con el Seat 600 ya asentado en el mercado nacional, Seat pensó en construir un coche que se posicionase como alternativa a los Renault 4 y Citroën 2CV. Y lo hizo basándose en el 600, creando su versión de cuatro puertas de forma muy particular. Seat enviaba a Carrocerías Costa, en Tarrasa, carrocerías de 600 para preparar. En aquel especialista las cortaban por la mitad, las alargaban 18 cm, instalaban puertas traseras y colocaban un techo nuevo que, por lógica, era más largo. El Seat 800 medía 3,47 metros de longitud y apenas pesaba 35 kg más que el Seat 600. Las carrocerías ya transformadas se devolvían a Seat, donde se montaba el interior, toda la parte mecánica y eléctrica y el motor, que por cierto era el mismo de cuatro cilindros, 787 cc y 29 CV que empleaba el Seat 600 L y con el que el práctico 800 podía alcanzar 105 km/h de velocidad máxima. La caja de cambio era manual de cuatro velocidades. El Seat 800 se fabricó durante poco tiempo. Se presentó en 1963 y se produjo entre enero de 1964 y mayo de 1967. En total se construyeron 18.200 unidades de este particular modelo, no muchas debido al proceso artesanal que requería el montaje de cada ejemplar y que inevitablemente demoraba el tiempo que se dedicaba a cada uno. En su día el Seat 800 costaba unas 75.000 pesetas, mientras que en la actualidad es un automóvil clásico muy escaso (es francamente raro de ver) y, por tanto, bastante cotizado: para disponer de una buena unidad se tienen que desembolsar entre 8.000 y 12.000 euros en función de su estado de conservación y su posible nivel de restauración. [sf_btn type="newsletter" txt="¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí" url="https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news"]
¿Sabías que hace 60 años existió un Seat 600 de cuatro puertas? Se llamaba Seat 800 y fue idea de la marca española como alternativa a la no fabricación bajo licencia del Fiat 600 Multipla. De hecho, el Seat 800 no tuvo homólogo en Fiat. Literalmente, el Seat 800 era un Seat 600 cortado por la mitad, alargado y provisto de dos puertas extra que le proporcionaban un más cómodo acceso a unas plazas posteriores que resultaban mucho más amplias que las del 600 en espacio para las piernas (que no en anchura ni en altura, que eran las mismas). Procedamos a contarte cómo nació este clásico. Con el Seat 600 ya asentado en el mercado nacional, Seat pensó en construir un coche que se posicionase como alternativa a los Renault 4 y Citroën 2CV. Y lo hizo basándose en el 600, creando su versión de cuatro puertas de forma muy particular. Seat enviaba a Carrocerías Costa, en Tarrasa, carrocerías de 600 para preparar. En aquel especialista las cortaban por la mitad, las alargaban 18 cm, instalaban puertas traseras y colocaban un techo nuevo que, por lógica, era más largo. El Seat 800 medía 3,47 metros de longitud y apenas pesaba 35 kg más que el Seat 600. Las carrocerías ya transformadas se devolvían a Seat, donde se montaba el interior, toda la parte mecánica y eléctrica y el motor, que por cierto era el mismo de cuatro cilindros, 787 cc y 29 CV que empleaba el Seat 600 L y con el que el práctico 800 podía alcanzar 105 km/h de velocidad máxima. La caja de cambio era manual de cuatro velocidades. El Seat 800 se fabricó durante poco tiempo. Se presentó en 1963 y se produjo entre enero de 1964 y mayo de 1967. En total se construyeron 18.200 unidades de este particular modelo, no muchas debido al proceso artesanal que requería el montaje de cada ejemplar y que inevitablemente demoraba el tiempo que se dedicaba a cada uno. En su día el Seat 800 costaba unas 75.000 pesetas, mientras que en la actualidad es un automóvil clásico muy escaso (es francamente raro de ver) y, por tanto, bastante cotizado: para disponer de una buena unidad se tienen que desembolsar entre 8.000 y 12.000 euros en función de su estado de conservación y su posible nivel de restauración. [sf_btn type="newsletter" txt="¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí" url="https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news"]
¿Sabías que hace 60 años existió un Seat 600 de cuatro puertas? Se llamaba Seat 800 y fue idea de la marca española como alternativa a la no fabricación bajo licencia del Fiat 600 Multipla. De hecho, el Seat 800 no tuvo homólogo en Fiat. Literalmente, el Seat 800 era un Seat 600 cortado por la mitad, alargado y provisto de dos puertas extra que le proporcionaban un más cómodo acceso a unas plazas posteriores que resultaban mucho más amplias que las del 600 en espacio para las piernas (que no en anchura ni en altura, que eran las mismas). Procedamos a contarte cómo nació este clásico. Con el Seat 600 ya asentado en el mercado nacional, Seat pensó en construir un coche que se posicionase como alternativa a los Renault 4 y Citroën 2CV. Y lo hizo basándose en el 600, creando su versión de cuatro puertas de forma muy particular. Seat enviaba a Carrocerías Costa, en Tarrasa, carrocerías de 600 para preparar. En aquel especialista las cortaban por la mitad, las alargaban 18 cm, instalaban puertas traseras y colocaban un techo nuevo que, por lógica, era más largo. El Seat 800 medía 3,47 metros de longitud y apenas pesaba 35 kg más que el Seat 600. Las carrocerías ya transformadas se devolvían a Seat, donde se montaba el interior, toda la parte mecánica y eléctrica y el motor, que por cierto era el mismo de cuatro cilindros, 787 cc y 29 CV que empleaba el Seat 600 L y con el que el práctico 800 podía alcanzar 105 km/h de velocidad máxima. La caja de cambio era manual de cuatro velocidades. El Seat 800 se fabricó durante poco tiempo. Se presentó en 1963 y se produjo entre enero de 1964 y mayo de 1967. En total se construyeron 18.200 unidades de este particular modelo, no muchas debido al proceso artesanal que requería el montaje de cada ejemplar y que inevitablemente demoraba el tiempo que se dedicaba a cada uno. En su día el Seat 800 costaba unas 75.000 pesetas, mientras que en la actualidad es un automóvil clásico muy escaso (es francamente raro de ver) y, por tanto, bastante cotizado: para disponer de una buena unidad se tienen que desembolsar entre 8.000 y 12.000 euros en función de su estado de conservación y su posible nivel de restauración. [sf_btn type="newsletter" txt="¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí" url="https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news"]
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¿Sabías que hace 60 años existió un Seat 600 de cuatro puertas? Se llamaba Seat 800 y fue idea de la marca española como alternativa a la no fabricación bajo licencia del Fiat 600 Multipla. De hecho, el Seat 800 no tuvo homólogo en Fiat. Literalmente, el Seat 800 era un Seat 600 cortado por la mitad, alargado y provisto de dos puertas extra que le proporcionaban un más cómodo acceso a unas plazas posteriores que resultaban mucho más amplias que las del 600 en espacio para las piernas (que no en anchura ni en altura, que eran las mismas). Procedamos a contarte cómo nació este clásico. Con el Seat 600 ya asentado en el mercado nacional, Seat pensó en construir un coche que se posicionase como alternativa a los Renault 4 y Citroën 2CV. Y lo hizo basándose en el 600, creando su versión de cuatro puertas de forma muy particular. Seat enviaba a Carrocerías Costa, en Tarrasa, carrocerías de 600 para preparar. En aquel especialista las cortaban por la mitad, las alargaban 18 cm, instalaban puertas traseras y colocaban un techo nuevo que, por lógica, era más largo. El Seat 800 medía 3,47 metros de longitud y apenas pesaba 35 kg más que el Seat 600. Las carrocerías ya transformadas se devolvían a Seat, donde se montaba el interior, toda la parte mecánica y eléctrica y el motor, que por cierto era el mismo de cuatro cilindros, 787 cc y 29 CV que empleaba el Seat 600 L y con el que el práctico 800 podía alcanzar 105 km/h de velocidad máxima. La caja de cambio era manual de cuatro velocidades. El Seat 800 se fabricó durante poco tiempo. Se presentó en 1963 y se produjo entre enero de 1964 y mayo de 1967. En total se construyeron 18.200 unidades de este particular modelo, no muchas debido al proceso artesanal que requería el montaje de cada ejemplar y que inevitablemente demoraba el tiempo que se dedicaba a cada uno. En su día el Seat 800 costaba unas 75.000 pesetas, mientras que en la actualidad es un automóvil clásico muy escaso (es francamente raro de ver) y, por tanto, bastante cotizado: para disponer de una buena unidad se tienen que desembolsar entre 8.000 y 12.000 euros en función de su estado de conservación y su posible nivel de restauración. [sf_btn type="newsletter" txt="¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí" url="https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news"]
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¿Sabías que hace 60 años existió un Seat 600 de cuatro puertas? Se llamaba Seat 800 y fue idea de la marca española como alternativa a la no fabricación bajo licencia del Fiat 600 Multipla. De hecho, el Seat 800 no tuvo homólogo en Fiat. Literalmente, el Seat 800 era un Seat 600 cortado por la mitad, alargado y provisto de dos puertas extra que le proporcionaban un más cómodo acceso a unas plazas posteriores que resultaban mucho más amplias que las del 600 en espacio para las piernas (que no en anchura ni en altura, que eran las mismas). Procedamos a contarte cómo nació este clásico. Con el Seat 600 ya asentado en el mercado nacional, Seat pensó en construir un coche que se posicionase como alternativa a los Renault 4 y Citroën 2CV. Y lo hizo basándose en el 600, creando su versión de cuatro puertas de forma muy particular. Seat enviaba a Carrocerías Costa, en Tarrasa, carrocerías de 600 para preparar. En aquel especialista las cortaban por la mitad, las alargaban 18 cm, instalaban puertas traseras y colocaban un techo nuevo que, por lógica, era más largo. El Seat 800 medía 3,47 metros de longitud y apenas pesaba 35 kg más que el Seat 600. Las carrocerías ya transformadas se devolvían a Seat, donde se montaba el interior, toda la parte mecánica y eléctrica y el motor, que por cierto era el mismo de cuatro cilindros, 787 cc y 29 CV que empleaba el Seat 600 L y con el que el práctico 800 podía alcanzar 105 km/h de velocidad máxima. La caja de cambio era manual de cuatro velocidades. El Seat 800 se fabricó durante poco tiempo. Se presentó en 1963 y se produjo entre enero de 1964 y mayo de 1967. En total se construyeron 18.200 unidades de este particular modelo, no muchas debido al proceso artesanal que requería el montaje de cada ejemplar y que inevitablemente demoraba el tiempo que se dedicaba a cada uno. En su día el Seat 800 costaba unas 75.000 pesetas, mientras que en la actualidad es un automóvil clásico muy escaso (es francamente raro de ver) y, por tanto, bastante cotizado: para disponer de una buena unidad se tienen que desembolsar entre 8.000 y 12.000 euros en función de su estado de conservación y su posible nivel de restauración. [sf_btn type="newsletter" txt="¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí" url="https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news"]
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