Para todos aquellos que no hayan oído hablar de las 24 Horas Ford, comentar que aquí no gana el que más corre, se juntan una serie de parámetros que hacen especial a esta carrera. Cada equipo dispone de un total de 235 litros de carburante para consumir durante las 24 horas dando el mayor número posible de vueltas al circuito del Jarama, por lo que mantener un consumo bajo yendo lo más deprisa posible se convierte en una obsesión de todos y cada uno de los componentes del equipo. La teoría parece fácil pero ¿y la práctica?