¿Cuál es el mayor inconveniente de tener un cabrio e ir descapotado -si no llueve-? Seguramente sea el frío, ya que aún con el sol en el cielo la temperatura exterior puede ser muy baja. Ante este problema, el fabricante alemán Mercedes-Benz ideó un sistema que daba con la solución. Se trata de una tecnología de calefacción denominada ‘Airscarf’ consistente en unas salidas de climatización instaladas en la parte de atrás del cuello de los ocupantes, entre el respaldo del asiento y el reposacabezas, que rodea el cuello de los viajeros, creando un ‘efecto bufanda’.
Pues bien, ahora el Tribunal Federal de Justicia de Alemania acaba de prohibir a la marca alemana la instalación de este sistema en sus vehículos en el país teutón. ¿La razón? Una discusión sobre la patente del mismo. De hecho, la propia Mercedes-Benz no ha escondido su asombro, pues esta batalla legal ya venía desde hace tiempo y las instancias inferiores habían fallado a favor de la marca. En cualquier caso, desde Mercedes-Benz se espera próximamente un recurso, ya que la imposibilidad de la instalación de Airscarf podría significar una pérdida de ventas notable en el segmento de los vehículos cabrio.
Así, los derechos de este invento se adjudican a Ludwig Schatzinger, quien habría desarrollado esta tecnología hace 20 años, en 1996. Por último, la justicia alemana está esperando la declaración por parte de Mercedes-Benz de los coches vendidos con Airscarf durante los últimos 18 años para calcular la indemnización que se le debería abonar al inventor.