
Dentro de un año y medio, la alianza francojaponesa completará la compra de unas acciones que en estos momentos están en manos de la empresa estatal rusa Rostejnologii y de Troika Dialog. Por ellas pagará un precio de 750 millones de dólares. De esta cantidad, Nissan aportará 400 millones y Renault, 350. Pero esta operación se realizará en distintos pasos.
El primero de ellos es que Renault-Nissan forme una joint venture con Rostejnologii; dado que esta empresa posee hoy por hoy el 27 % de las acciones, juntas controlarán el 74,5 % de Autovaz. Al principio, esta joint venture estará participada a partes iguales entre las dos compañías, pero a continuación emitirá participaciones por valor de 750 millones de dólares, lo que permitirá a Renault controlar el 67 %.
Finalmente, con el dinero obtenido por dicha venta Renault-Nissan comprará, por 600 millones de dólares, el 20,5 % de Autovaz perteneciente a Troika Dialog y, por 150 millones, un 4 % de las que tiene Rostejnologii.
En la actualidad, Renault-Nissan posee el 25 % de las acciones, y ya se han visto los primeros frutos en la marca Lada: El Lada Largus no es otra cosa que un Dacia Logan con otro nombre. Lada es una pieza clave en los planes de Renault para hacerse con una buena parte del pastel del mercado ruso, pues esta marca local disfruta de una cuota de mercado en Rusia del 21,8 %.