Los híbridos, seguros según para quién…

El IIHS (Instituto para la Seguridad en Carretera) ha hecho público que, según sus datos, el pasajero de un automóvil híbrido tiene un 25 % menos de posibilidades de resultar herido en un choque. El responsable de la investigación, Matt Moore, asegura que «el peso es un factor importante. Los híbridos son de media un […]


El IIHS (Instituto para la Seguridad en Carretera) ha hecho público que, según sus datos, el pasajero de un automóvil híbrido tiene un 25 % menos de posibilidades de resultar herido en un choque.

El responsable de la investigación, Matt Moore, asegura que «el peso es un factor importante. Los híbridos son de media un 10 % más pesados que sus homólogos de combustión. Esta masa extra les da ventaja sobre los segundos en caso de accidente». Señala que mucho depende también de la conducción del usuario y las circunstancias en que ésta se produce, pero desde el IIHS garantizan que estas variables se han tenido en cuenta para la realización del estudio.

Los expertos analizaron veinticinco modelos disponibles en el mercado estadounidense entre 2003 y 2011 con versión tanto híbrida como convencional -por lo que se excluyó al Toyota Prius y al Honda Insight-. También se centraron en el caso de un accidente del que el conductor del híbrido era culpable y de una persona herida que viajaba de pasajero y que así quedó registrada para las autoridades sanitarias. Los datos presentados apuntan que hay un 27 % menos de probabilidades de sufrir un accidente con el conductor del híbrido como responsable.

Esta nueva afirmación contradice lo que suponían los vehículos híbridos en el pasado, cuando eran más pequeños y ligeros. Ahora han crecido en tamaño y siguen contando con el peso extra de las baterías. Un coche pesado proporciona esta ventaja de seguridad porque en una colisión ejercerá más fuerza contra el coche ligero o contra el objeto alcanzado, en lugar de recibirla.

Pero lo malo, como avanzábamos, es que los híbridos se han revelado como una amenaza para los peatones. Es un 20 % más probable provocar un atropello que con los mismos modelos de combustión -más incidentes sin daños en el vehículo registrados por cada mil unidades aseguradas-. «Cuando los híbridos funcionan en modo eléctrico los peatones no pueden oír que se acercan», prosigue Moore, «por lo que puede que se adentren en la calzada sin comprobar si venían coches». Recientemente el Congreso estadounidense dio al gobierno un plazo de tres años para introducir una ley que obligara a los fabricantes a incluir en estos coches algún tipo de señal acústica.

Scroll al inicio