A la venta el 1 de marzo a partir de 112.832 euros

Primer contacto con el Porsche 911 Carrera S Cabrio PDK

Autofácil
Autofácil
Hace 30 años, llegó la primera versión cabrio del 911. En esta última generación, Porsche sigue fiel a la tradicional capota blanda, que se pliega en tan sólo 13 segundos de forma totalmente automática y siempre que se circule por debajo de 50 km/h.


Con la nueva generación del Porsche 911 -denominada 991- recién ‘aterrizada’, la marca alemana no ha tardado mucho más en ofrecer la variante descapotable. Lo más destacable es la incorporación de un techo de lona tricapa disponible en cuatro colores -negro, azul, rojo y marrón- que se pliega en forma en tan sólo 13 segundos -se puede accionar en marcha circulando a menos de 50 km/h- en un pequeño compartimento emplazado tras los reposacabezas.

La estructura de este elemento es muy ligera, ya que está fabricada en magnesio. El peso apenas aumenta en 55 kg respecto al coupé; esto se debe al aumento de la rigidez estructural del coche gracias a los pertinentes refuerzos, que consiguen que la resistencia a la torsión aumente un 18%.

El motor lo hereda del normal; se trata del 3.8 con seis cilindros bóxer de inyección directa que desarrolla 400 CV, lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 seg. y alcanzar una velocidad máxima de 299 km/h. En este caso, hemos probado una unidad asociada a una caja automática de doble embrague PDK de siete velocidades con levas en el volante.

Por dentro: más botones, misma calidad
Se nos ocurren pocos vehículos con una postura de conducción tan conseguida. Vas sentado muy bajito, pero los ajustes tanto del volante como del asiento -que aúna comodidad y sujeción a parte iguales- permiten que cualquier conductor, sea cual sea su fisonomía, se sienta como en casa en pocos segundos. El diseño interior cambia por completo respecto a la anterior generación; destaca la nueva consola central -atestada de botones y similar a la que emplea el Panamera- y la pantalla de 4,6– ubicada en la completa instrumentación, que recoge datos relacionados con el ordenador de a bordo, navegador, teléfono, equipo de audio… La calidad de los materiales y los ajustes son excelentes. Además, no se escucha el más mínimo crujido incluso circulando por asfalto deteriorado. Los botones ofrecen un tacto sólido y quedan muy a mano del conductor -excepto los del climatizador, emplazados algo bajos-.

En marcha: al alcance de todo el mundo
Arrancar un 911 siempre resulta una experiencia gratificante, por lo que hacerlo con la capota abierta suele poner los pelos de punta -el propulsor cobra vida con un sonoro golpe de gas para, inmediatamente, estabilizarse con un ralentí sugerente, ronco e intimidatorio- . El motor ofrece un rendimiento sobrecogedor, ya que la entrega de potencia es contundente en un margen muy amplio de revoluciones -desde apenas 1.500 rpm hasta pasadas las 7.000 rpm-. Para colmo, el consumo es realmente bajo para las prestaciones que desarrolla, ya que no resulta complicado moverse en valores entorno a los 10 l/100 km -el dato oficial de consumo medio se queda en 8,9 l/100 km-.

El comportamiento se puede calificar de asequible para ser un deportivo de altas prestaciones, mostrándose noble en cualquier situación -la plataforma es completamente nueva; la anterior databa de 1998-. Resulta sencillo conducirlo rápido sin esfuerzo y con un nivel de seguridad muy elevado. Lo único a lo que hay que estar atento a la gran agilidad en los cambios de apoyo rápidos, ya que todo sucede en pocas décimas de segundo. Es de esos coches en los que sólo te tienes que preocupar de frenar con decisión -los frenos ofrecen un tacto sólido, son potentes y prácticamente inagotable- apuntar con el volante al vértice de la curva -la dirección es muy precisa y directa, con sólo 2,6 vueltas entre topes- y pisar el acelerador a la salida de la curva -el nivel de tracción es increíble-. La suspensión adaptativa PASM posee un tarado ligeramente más blando que la versión cerrada pero, en definitiva, brinda un equilibrio entre la comodidad que proporciona circulando en autopista y la dureza para que la carrocería apenas se incline en los apoyos más fuertes -resulta recomendable optar por el paquete Sport Chrono que, por 2.257 euros, ofrece tres modos (normal, sport y sport plus) que intervienen en la dureza de la suspensión, la respuesta del cambio y el acelerador, el nivel de intervención de los controles electrónicos…-.

La caja de cambio PDK se adapta a cualquier tipo de exigencia. Si quieres ir tranquilo, realizará cambio suaves, sin tirones… y si quieres circular rápido, la palabra eficacia cobra todo su sentido, aunando rapidez y precisión a partes iguales.

Precios:
Porsche 911 Carrera Cabrio PDK 112.832 €
Porsche 911 Carrera Cabrio 113.332 €
Porsche 911 Carrera S Cabrio 129.395 €
Porsche 911 Carrera S Cabrio PDK 133.311 €

 

Porsche 911