El el Dodge Dart fue presentado en 1960 en EE.UU, donde era un compacto, casi un utilitario.
Así llegó a España En Europa era un coche grande y en España el más grande, lujoso, caro y potente del mercado, razón por la que se convirtió en el automóvil de los ministros de Franco y de muchos hombres adinerados que, por un precio más asequible, vieron en él una alternativa a los Mercedes o, por un poco más de dinero, la superación del Seat 1500.
Exteriormente, ‘nuestro’ Dodge correspondía al Dodge Dart 270 americano -versión remodelada del Dodge Dart de 1963– y venía equipado con el mayor de los dos motores posibles de seis cilindros, aunque no se planteó en ningún momento incorporar el V8 o el cambio automático, opciones disponibles en el mercado estadounidense.
¿Cuánto costaba?
El precio franco fábrica de la versión normal era de 240.000 pta;-el acabado GL costaba 260.000 pta, unas seis veces la renta per cápita de 1965 -cerca de 80.000 euros de hoy-.
Así lo “anunciaron”
Fue lanzado bajo el eslogan «Ruedan ya por España», al que siguió el poco imaginativo pero veraz «El coche español verdaderamente de lujo y moderno».
Como Clásico
Se fabricó en España.-Desde julio de 1965, hasta enero de 1966, se produjeron en nuestro país 1.200 unidades en color negro, crema y rojo que se correspondían exactamente con las especificaciones técnicas y estéticas del Dodge 270 sedán americano de cuatro puertas y seis plazas de 1965.
Durante sus escasos meses de fabricación española no iba a presentar variación alguna.
Por dentro
La versión “estándar” venía bastante bien dotada: incorporaba encendedor, claxon doble y luz de marcha atrás, así como iluminación en el maletero, capó y guantera, a lo que también había que añadir un juego de herramientas.
La versión GL -la más vendida– disponía de ruedas de banda blanca, radio, apoyabrazos central trasero, retrovisor exterior y unas vistosas molduras recubiertas de aluminio en los laterales y la parte trasera; además, ofrecía la opción de instalar aire acondicionado.
Así iba
Barreiros lo presentó como un automóvil capaz de alcanzar los 170 km/h con un consumo medio de 12 l/100 km.
En cambio, la prensa especializada calculó su velocidad máxima entre los 154,8 y los 157 km/h, el 0-1000 m en 37 segundos y unos consumos de entre 10,2 y 18,78 litros a los 100 km que fácilmente superaban los 20 litros en ciudad, lo que le convertía en el coche más rápido… y el más ‘voraz’ del mercado español de su época.
Conclusión
El Dodge Dart fue una excelente opción como coche potente y de lujo para la España de su época, imponiéndose a muchos automóviles importados, claramente inferiores en prestaciones y muy superiores en precio.
Aquéllos que no se lo podían permitir y quienes vieron cómo su negocio de importación se tambaleaba, tildaron al Dart de ‘coche de nuevos ricos’, lo que no era ni justo ni verdad.
Compacto de referencia…
Lo bueno… La ‘crítica’ ensalzó su imponente aspecto así como su suspensión, confort, estabilidad, visibilidad, calefacción, velocidad, acabado y la estanqueidad de su carrocería.
Y lo malo… Los defectos: su primera no sincronizada , unos frenos propensos a bloquearse y al fading, l a escasa luz de los faros y su envergadura, que no le hacía un coche muy manejable.
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Ficha Técnica
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