La ciudad de Burgos cuenta, desde este mes de marzo, con 12 nuevos radares en su casco urbano. Instalados para reforzar la apuesta del Ayuntamiento para reforzar la seguridad vial en sus calles (para lo cual, por ejemplo, han limitado a 30 km/h la velocidad en más de mil vías con un sólo carril por sentido), estos radares incluyen una pantalla en la que muestran a los conductores su velocidad real de circulación para promover la concienciación de los automovilistas.
Aunque lo más destacable es que esta docena de cinemómetros registran asismimo datos complementarios sobre el tráfico, tales como el número de vehículos en circulación diferenciados por cada sentido de la vía.
Conectados a una plataforma inteligente de tráfico
Los nuevos radares, fabricados por el especialista Lacroix City, están, además, conectados a una plataforma web que permite la visualización de los radares y su gestión desde un PC, una tablet o un smartphone. De esta forma, los radares son capaces de proporcionar información y estadísticas a este software que, además de ofrecer la posibilidad de configurarlos (puede establecer umbrales de medición, o configurar los mensajes a emitir por las pantallas que les acompañan), permite la vigilancia del tráfico en tiempo real, e incluso el análisis del comportamiento de los conductores. ¿Un ejemplo? La plataforma puede alertar a los técnicos del Ayuntamiento de que, en una zona vigilada por uno de estos radares se está superando el límite de densidad de tráfico preestablecido, de forma que puedan enviar una patrulla de agentes para que regulen el tráfico antes de que se forme un atasco.
Este sistema conjunto de radares y plataforma web funciona ininterrumpidamente 24 horas al día durante los los siete días a la semana. Y desde la firma Lacroix City indican que, desde 2011, ya existen más de 4.000 radares similares funcionando en varios países de Europa.