Si vas a viajar en coche por Europa, desde hace algunos años no sólo tendrás que preocuparte de sacar la carta verde del seguro o el carnet internacional. De igual forma, y si vas a circular por Alemania, Austria, Francia y Dinamarca, también deberás preocuparte de lograr la etiqueta ambiental equivalente en esos países para tu vehículo, de forma que puedas acceder a las zonas de bajas emisiones (ZBE) o zonas de circulación restringidas de esos países.
Ojo, también existe un programa de etiquetas medioambientales en Bélgica, pero que sólo afecta a tres de sus ciudades; y en Portugal, que sólo afecta a Lisboa y del que hablaremos más tarde.
Lo bueno es que entre las etiquetas de estos países y las españolas, existe cierta equivalencia, que puedes consultar en la web de la DGT, en el apartado ‘Consulta del distintivo ambiental de tu vehículo’ y en el subapartado ‘Equivalencia de distintivos ambientales en la UE’.
Las etiquetas medioambientales españolas y su equivalencia con las europeas
De cualquier forma, te la resumimos. En Francia, las etiquetas se denominan Crit’Air; la verde señala a los vehículos menos contaminantes (eléctricos e híbridos enchufables) y, a partir de ahí, cada número indica un nivel de emisiones del vehículo. En Alemania, tienen un determinado número que marca el grado de contaminación del coche; mientras que en Dinamarca existe una tarjeta Low Emission Zone que aglutina varias españolas y, en Austria, las etiquetas indican, directamente, la norma Euro de contaminación que requiere un vehículo para acceder a una zona.
Así las cosas, y para furgonetas ligeras, la etiqueta Cero española se corresponde, en Alemania, con los distintivos 6 y 5; en Austria, con las etiquetas Euro 6; en Francia, con la etiqueta Crit’Air verde; y en Dinamarca, con la etiqueta Low Emission Zone.
En cuanto a la etiqueta Eco española, se corresponde con las etiquetas 4 (Alemania), Euro 6 (Austria) Crit´Air 1 (Francia) y Low Emission Zone (Dinamarca).
Respecto a la etiqueta C española, equivale en Alemania a la etiqueta 4; en Austria, a la Euro 6; en Francia, a la Crit´Air 2; y en Dinamarca, a la Low Emission Zone. Por último, la etiqueta B española se corresponde a las etiquetas 4(Alemania), Euro 5 y Euro 4 (Austria), Crit´Air 3 (Francia) y Low Emission Zone (Dinamarca).
Pero, ojo, porque a pesar de la equivalencia entre las etiquetas españolas y las de estas otras cuatro naciones, eso no quiere decir que puedas circular ‘por que sí’ por zonas con restricciones de acceso en estos países (pese a que tu vehículo cuente con la etiqueta equivalente necesaria).
Si necesitas hacerlo, tal y como señala la propia DGT: “debes informarte antes de ir sobre si es necesario obtener un distintivo en el país al que viajas, cómo hacerlo y de los criterios para poder circular”. ¿Tu mejor opción? Preguntarlo en la embajada o consulado correspondiente.
Si tengo un coche extranjero con distintivo medioambiental… ¿puedo circular dentro de las ZBE españolas?
Sí, y sin necesidad de adquirir una etiqueta española. Pero ojo, porque sólo podrás circular por las zonas permitidas para determinadas etiquetas únicamente si la etiqueta de tu vehículo se corresponde con el distintivo español necesario para acceder a esa zona. Puedes consultar la equivalencia entre etiquetas extrajeras y las españolas en esta web de la DGT.
Eso sí, recuerda que si tu vehículo no cuenta con el distintivo equivalente al español y accedes a una ZBE, te sancionarán con 200 euros.
Dos casos muy concretos: cómo afrontar las ZBE en Francia y Portugal
Qué debes hacer si vas a viajar por Francia
Como ya hemos indicado, en Francia existen las tarjetas Crit´Air, que están vigentes no sólo en París (en la zona que limita la autopista A86, de lunes a viernes de 8 a 20 horas, excepto los días festivos) sino, también, en otras grandes ciudades como Lyon, Aix-Marsella, Toulouse, Niza, Montpellier, Estrasburgo, Grenoble, Ruán, Reims, Saint-Étienne… Además, a partir de 2025, todas las ciudades y aglomeraciones de más de 150.000 habitantes estarán obligadas a introducir una Zona de Movilidad de Bajas Emisiones… e introducirán el uso de las etiquetas Crit’Air.
Así las cosas, si quieres viajar y acceder a algunas de estas ciudades en Francia, tendrás que adquirir obligatoriamente esta etiqueta, que se requiere para cualquier vehículo extrajero. Lo bueno es que puedes adquirir en esta web (certificat-air.gouv.fr/) introduciendo los datos de tu vehículo (en esta web tienes un tutorial al respecto) y que te enviarán a casa en un plazo de 10 días. Además, no es cara, ya que te cobrarán 4,61 euros por la emisión de cada etiqueta, gastos de envío a tu domicilio incluidos.
Una vez tengas esta etiqueta, simplemente colócala en tu vehículo y podrás acceder a las zonas que te permita su uso. Ten en cuenta que si accedes a una ZBE en Francia (allí, se denominan ZFE-m, zonas de movilidad de bajas emisiones; o ZCR , zones à circulation restreinte) sin ella, te sancionarán con 68 euros. Puedes encontrar más información aquí.
Qué debes hacer si vas a viajar por Portugal
En Portugal, tan sólo debes preocuparte de las ZBE si vas a acceder a Lisboa en coche, ya que es la única ciudad que tiene zonas de acceso restringido similares a las ZBE españolas.
En concreto, Lisboa cuenta con dos ZBE o ZER (Zona de Emissoes Reduzidas): una más céntrica, denominada ZER Zona 1 y a la que no pueden acceder vehículos matriculados con anterioridad al año 2000 (esto es, permite el paso a los vehículos que cumplan la norma Euro3); y otra, llamada ZER Zona 2 , que afecta a la periferia y a la que se prohíbe el acceso de vehículos anteriores al año 1997 (los que no cumplen con la norma Euro 2).
¿Necesitas entonces adquirir alguna etiqueta? No. Si tu coche cumple con las citadas normativas anticontaminación. Esto es, si tiene la etiqueta B y C, podrás pasar por esas zonas sin miedo, ya que son unas cámaras las que, por matrícula, van comprobando si los vehículos que acceden a esta zona puede circular por ella legalmente. Aún así, si vas a alojarte en un establecimiento situado dentro de la ZER Zona 1 o Zona 2, no está de más que avises al alojamiento, para que registren tu matrícula en el sistema; por si acaso.