Sistemas de detección de radares, ¿son todos legales?

Avisadores de radar
¿Qué dice la Ley? Su uso es perfectamente legal. Eso sí, ten en cuenta que debes encender y configurar este aparato en parado, ya que si lo haces en marcha, te podrían sancionar con 200 euros y la retirada de 3 puntos por ´conducir utilizando un dispositivo incompatible con la atención a la conducción´.
Detectores de radar
- Portátiles: Cuestan desde aproximadamente 200 euros y se pueden colocar encima del salpicadero o en el parabrisas.
- Fijos: Constan de una antena -que se instala en el vano motor del coche- y un receptor. Son mucho más caros que los portátiles: cuestan desde 500 hasta 2.000 euros a lo que tendrás que sumar el coste de su instalación -desde 200 a 600 euros-; pero son los detectores más eficaces.
Ojo, desde 2014 varios fabricantes tienen a la venta dispositivos -tanto portátiles como fijos- que aúnan la función de detector de radar + avisador. Dentro de los detectores, son los más vendidos y, por ello, hemos centrado nuestra atención en estos aparatos. Alguna marca permite anular la opción de detección y así circular legalmente.
¿Qué dice la Ley? Su uso -que no su instalación- es ilegal desde el 9 de mayo de 2014, cuando entró en vigor la actual Ley de Tráfico -antes, estaban permitidos-. Se sanciona con una multa de 200 euros y la retirada de tres puntos del carnet.
Inhibidores de radar
¿Qué dice la Ley? Su uso está completamente prohibido y, si te pillan utilizando uno -incluso aunque el coche no esté a tu nombre-, te sancionarán con una multa de 6.000 euros y la retirada de seis puntos, además de poder, incluso, decomisarte el coche -que pasará a la Administración pública sin que tú recibas ninguna compensación-. También está prohibida su instalación, y si la policía descubre a un taller montándolos, le sancionará con 30.000 euros.