Hazlo tú mismo

Cómo sustituir el filtro de la climatización

Juan Carlos Ramírez
Juan Carlos Ramírez
En la mayoría de los casos, sustituir el filtro anti-polen es una operación sencilla que podremos realizar con la herramienta que equipa nuestro vehículo. Cambiarlo regularmente es más importante de lo que parece, especialmente si circulas fuera del asfalto.


El filtro de aire del habitáculo impide que hasta las partículas más pequeñas suspendidas en el aire pasen al habitáculo. Con el paso del tiempo, va acumulando suciedad, dificulta el paso del aire limpio, añade olores a la climatización y puede degradarse hasta romperse. Sustituirlo regularmente es cuidar tu salud.

Si realizamos rutas durante la época veraniega, el polen, el polvo y la materia seca vegetal que se encuentran en suspensión en el aire pueden ocasionar una pérdida de rendimiento del equipo de climatización. El problema reside en la colmatación del filtro anti-polen, que se encuentra en la zona de aspiración de aire del sistema de climatización del vehículo.

Para evitar que esto suceda, debemos colocar el sistema de circulación de aire en la posición de recirculación, es decir: con la toma de aire exterior cerrada, y tener la precaución de colocar el selector en la posición abierta o tomando aire del exterior en cuanto volvamos a conducir en condiciones favorables, para evitar respirar el aire que se mantiene en el vehículo, al tiempo que impedimos que el habitáculo coja olores.

La realidad es que más tarde o más temprano, el filtro que equipa nuestro vehículo se irá colmatando hasta que dificulte el rendimiento del equipo de aire frío y, en menor medida, el de aire caliente.

Si circulas habitualmente por campo, el filtro anti-polen puede saturarse prematuramente

Una solución de emergencia pasa por aspirar el polvo contenido en el filtro o soplarlo con aire comprimido, teniendo en cuenta, en cada caso, el movimiento del aire a favor de la retirada de residuos del filtro. Incluso podemos lavarlo posteriormente con agua jabonosa y dejarlo secar al sol o acelerar el proceso mediante un secador de pelo o método similar.

Pero, sin duda, la solución más eficaz y correcta pasa por sustituir el filtro por otro nuevo. Ten en cuenta que no es un recambio barato. Su coste varía según modelos, pero lo razonable es que se encuentre entre 20 y 30 euros. Una de las ventajas de este trabajo es que podemos hacerlo con un simple destornillador de estrella; en nuestro caso, lo hicimos con el suministrado en el kit herramientas del vehículo.

En muchos casos, el destornillador con cabeza Phillips que incluye la herramienta del vehículo es suficiente para desmontar todo lo necesario para acceder al filtro.

En muchos casos, el destornillador con cabeza Phillips que incluye la herramienta del vehículo es suficiente para desmontar todo lo necesario para acceder al filtro.

 

Tras localizar la ubicación del filtro, procedemos al desmontaje de la tapa de la guantera. En otros casos, el filtro es accesible desde el vano del motor o desde el lateral de la consola central. Para encontrarlo, localiza la toma de aire (suele tener una rejilla) y sigue su conducto hasta dar con él.

Tras localizar la ubicación del filtro, procedemos al desmontaje de la tapa de la guantera. En otros casos, el filtro es accesible desde el vano del motor o desde el lateral de la consola central. Para encontrarlo, localiza la toma de aire (suele tener una rejilla) y sigue su conducto hasta dar con él.

Desmontada la tapa, hacemos lo propio con el mecanismo que la hace bascular, nuevamente fijado, en nuestro Suzuki Grand Vitara, mediante un tornillo Phillips.

 

Desmontada la tapa, hacemos lo propio con el mecanismo que la hace bascular, nuevamente fijado, en nuestro Suzuki Grand Vitara, mediante un tornillo Phillips.

Desplazamos la guantera hacia la derecha para que el eje sobre el que pivota salga de su alojamiento y nos permita retirar la guantera.

 

Desplazamos la guantera hacia la derecha para que el eje sobre el que pivota salga de su alojamiento y nos permita retirar la guantera.

A continuación, tendremos delante de nosotros el alojamiento del filtro de polen, que se encuentra cerrado mediante una tapa de plástico.

 

A continuación, tendremos delante de nosotros el alojamiento del filtro de polen, que se encuentra cerrado mediante una tapa de plástico.

Retiramos la tapa de plástico con mucho cuidado para evitar dañar las pestañas que aseguran su cierre y garantizan la estanqueidad de la caja.

 

Retiramos la tapa de plástico con mucho cuidado para evitar dañar las pestañas que aseguran su cierre y garantizan la estanqueidad de la caja.

Extraemos el filtro nuevamente con cuidado para evitar que la suciedad acumulada pase al interior de la caja que lo aloja y a los conductos de la climatización.

 

Extraemos el filtro nuevamente con cuidado para evitar que la suciedad acumulada pase al interior de la caja que lo aloja y a los conductos de la climatización.

Comprobación del modleo de filtro

 

Antes de colocar el nuevo filtro, conviene comprobar que el modelo del filtro que hemos adquirido corresponde en espesor y medidas con el que acabamos de retirar. Lo colocamos siguiendo el mismo criterio de posición que el anterior, si bien lo normal es que, por su forma, solo admita una posición de montaje.

Filtro nuevo y filtro en mal estado para ser sustiuido