Tendrá el tamaño de una moneda
En un futuro no muy lejano, este dispositivo tendrá el tamaño de una moneda de un céntimo y será una parte virtualmente invisible del vehículo que ayudará a futuras generaciones de conductores. Una pequeña lente forma parte del prototipo de este sistema de asistencia a la conducción que avisará al conductor cuando éste corra el riesgo de dormirse al volante. En el Museo Alemán de la Higiene de Dresde se ha exhibido un primer prototipo precursor de este dispositivo dentro de la exposición “Sueño y sueños”, que ofrece algunos de los últimos avances acerca de la somnolencia.
El sueño, causante del 24% de los accidentes
El Grupo de Investigación de Volkswagen equipó hace unos años algunos vehículos experimentales con un sistema diseñado para reducir la somnolencia. El motivo de esos experimentos fueron los datos de un estudio, efectuado por la Asociación de Empresas Aseguradoras Alemanas, que determinó que la somnolencia es la causa principal del 24 por ciento de los accidentes mortales en autopista.
Estudia el parpadeo de los ojos
Hasta hace muy poco, los avances en cuanto a ayuda inteligente a la conducción se centraban en el vehículo y su entorno. Como resultado de ello surgieron sistemas como el Control Automático de Distancia (ACC), el Front Scan, un sistema de control del entorno del automóvil, y el Side Scan de control de carril, que fueron incorporados en el nuevo Touareg, para asistir al conductor en la tarea de la conducción. Pero en el tema de la somnolencia, el conductor es el foco de la investigación. El nuevo sistema de ayuda está diseñado para detectar el estado en el que se encuentra. Esta información sobre el grado de cansancio se obtiene teniendo en cuenta la frecuencia de parpadeo.
Una investigación laboriosa
En la primera fase de este proyecto de investigación, se desarrollaron varias series de pruebas de simulación, en Wolfsburg y en el Centre for Man-and-Machine Systems de la TU Berlin. Durante las pruebas, los participantes condujeron por carreteras monótonas, largas y por vías con cambios de rasante, en momentos distintos del día y la noche, hasta quedarse dormidos.
Mientras estaban al volante, el sistema recogía distintos parámetros de conducción, movimientos de cabeza, parpadeo y cambios en las facciones de la cara que posteriormente eran analizados para determinar la forma de prevenir el estado en que se encontraba conductor. El resultado de dichas investigaciones demostró que los parámetros que describen el parpadeo son los más fiables cuando se trata de delimitar el riesgo de que el conductor se duerma.
A medida que la investigación fue avanzando, se hizo posible desarrollar un sensor basado en el funcionamiento de una cámara que permitía medir el parpadeo del conductor y asociarlo con un estado concreto. Para poder utilizarlo en un automóvil, todos los componentes debían reducir su tamaño al máximo, teniendo en cuenta el poco espacio disponible. Los elementos del sistema debían ser capaces de observar a todo tipo de conductores, altos y bajos, hombres y mujeres, y hacerlo en todo tipo de condiciones de iluminación. También debían ser resistentes a las vibraciones del coche o a los cambios significativos de temperatura, solo por mencionar alguna de las condiciones que se dan en el interior de cualquier vehículo.
Avisar sin asustar
La constatación de que el conductor empieza a estar cansado y de que pierde concentración debe poder medirse y transformarse en una acción de ayuda. Por este motivo, actualmente se están desarrollando distintas estrategias para ofrecer información al conductor sin asustarle.
Además, las investigaciones se centran también en determinar cuándo el sistema de observación del conductor puede complementarse con otros sistemas de ayuda, como el de control distancia o asistencia de cambio de carril, para ofrecer ayuda en situaciones concretas. De ese modo, se puede llegar al punto en que el vehículo monitorice al conductor y acompañante para asegurar que están en condiciones optimas para permanecer al volante.