Primera prueba del Volvo C40 Recharge 2022

A mediados de 2021, Volvo puso a la venta la versión 100 % eléctrica del XC40, en concreto la equipada con dos motores, tracción total y 408 CV. Apenas un año después, tuvimos una sorpresa: el C40 2022, una carrocería de tipo coupé que sólo iba a contar con mecánicas eléctricas y que, además, únicamente se vendería a través de la página web de Volvo.
El concepto del C40 Recharge le convierte en un modelo sin rivales directos en el mercado. El más semejante es el Audi Q4 Sportback e-tron, si bien es notablemente más largo (4,59 metros frente a 4,44 m del Volvo). No obstante, el aspecto en el que más sobresale es por potencia, ya que ninguna de sus alternativas por tamaño o precio disponen de una versión por encima de los 350 CV.
De hecho, su principal rival es el propio XC40 Recharge, que con idéntica mecánica y nivel de equipamiento cuesta 1.776 euros menos, es 5 cm más bajo y tiene algo más de maletero (6 litros). El peso es idéntico, si bien el C40 tiene unas prestaciones mejores, ya que cubre el 0 a 100 km/h en 4,7 segundos, 0,2 décimas más rápido, y tiene un consumo menor: 19,9 kWh/100 km frente a 20,5 kWh/100 km del XC40. Gracias a este último dato, su autonomía homologada también es ligeramente superior: 449 kilómetros frente a 438 km.

Asimismo, el C40 se beneficia de la tecnología estrenada en el XC40, como es el caso del sistema operativo Android que permite, entre otras funcionalidades, usar el navegador Google Maps sin necesidad de conectar el teléfono. Además, puede recibir actualizaciones a distancia, es decir, sin necesidad de acudir al concesionario.
Volvo C40 Recharge: así es por dentro
Al igual que el resto de modelos de Volvo, el C40 presenta unos acabados muy buenos, tanto por los materiales empleados como por el ajuste de los mismos. En el lado contrario, el manejo de la pantalla central, que alberga la mayoría de las funciones, no es intuitivo y requiere de un periodo de adaptación.

Las plazas delanteras no admiten pega, si bien en las traseras el espacio de la cabeza al techo es algo peor que en el XC40. No obstante, la principal pega está en el acceso, que se ve perjudicado por la caída del techo en la parte trasera. El maletero tampoco es excesivamente grande (419 litros), aunque se completa con un hueco de 31 litros bajo el capó delantero, que resulta ideal para almacenar los cables de recarga.
Volvo C40 Recharge: así va
El C40 Recharge está equipado con dos motores eléctricos, uno en cada eje, que en conjunto desarrollan 408 CV y le dotan de tracción a las cuatro ruedas. Las prestaciones son espectaculares, hasta el punto de que incluso parece que conducimos un coche aún más potente. Impresiona la capacidad de ganar velocidad en situaciones como, por ejemplo, al efectuar un adelantamiento; de hecho, en ocasiones puede llegar a resultar algo mareante para los ocupantes.

El C40 Recharge no dispone de modos de conducción que modifiquen la respuesta de los motores. Aunque sí cuenta con una configuración específica para fuera del asfalto, que se puede emplear hasta los 40 km/h. También incluye un modo One Pedal, que aumenta la retención al levantar el pie del acelerador y que, en la mayoría de ocasiones, hace innecesario usar el freno. Tanto esta función como la anterior se activan a través de la pantalla central.
La autonomía del C40 es semejante a la que obtuvimos en el XC40. En carretera, circulando a ritmos legales, se pueden alcanzar los 350 kilómetros sin necesidad de realizar una conducción ecológica. Cabe destacar que el navegador Google Maps integrado muestra el porcentaje de batería con el que el coche llegará al destino indicado, un dato que, además, calcula de forma muy precisa.
Ficha técnica del Volvo C40 Recharge
- Motor: Dos motores eléctricos
- Potencia conjunta: 408 CV (300 kW)
- Par: 660 Nm
- Tracción: A las cuatro ruedas
- Cambio: Automático, una velocidad
- Velocidad máxima: 180 km/h (autolimitada)
- Aceleración 0-100 km/h: 4,7 segundos
- Consumo medio: 19,9 kWh/100 km
- Autonomía: 449 km