Los fabricantes de automóviles no paran de desarrollar conceptos para garantizar la rentabilidad de su red comercial más allá de la propia venta de vehículos. La última propuesta en este sentido es Care by Volvo, una nueva línea de negocio que la marca escandinava ha puesto en marcha en un total de ocho países, entre ellos España. Hakan Samuelsson, presidente y CEO de Volvo, nos ha reunido con motivo del inicio de la Volvo Ocean Race en Alicante para contarnos más detalles de este proyecto.
Care by Volvo se define como un servicio de suscripción –algo similar a un renting–, aunque con ventajas exclusivas para los usuarios de la marca. El primer modelo en disfrutar de esta iniciativa es el nuevo Volvo XC40, un SUV compacto que tiene la responsabilidad de impulsar las ventas de la compañía a nivel global. Volvo espera vender 100.000 unidades de este modelo en todo el mundo en su primer año de vida –las ventas previstas para España son de 3.600 unidades, aunque la filial española espera que la marca le adjudique un total de 5.000 vehículos–.
Gracias a Care by Volvo, los clientes de la marca podrán disfrutar de un XC40 durante dos años con un completo paquete de servicios por una cuota fija de 699 euros al mes. Estos servicios están enfocados tanto en el propio usuario como en el vehículo. En el primer apartado encontramos asistencia telefónica 24 horas los 365 días del año, duplicado y renovación del carnet de conducir, traslado del vehículo al taller, teleasistencia y hasta servicio de farmacia a domicilio. Es decir, es lo más cercano a tener un mayordormo personal.
En el caso de los servicios para el cuidado del vehículo, la marca sueca ofrece por este precio asistencia en carretera, mantenimientos incluidos, el pago de los impuestos de matriculación y circulación, la sustitución de neumáticos, la gestión de multas o el vehículo de cortesía. A cambio de todo esto el usuario tendrá que abonar durante estos dos años un total de 16.776 euros.
Un concepto «para las nuevas generaciones»
Con Care by Volvo, la compañía quiere responder a las últimas tendencias en el campo de la movilidad. Una de esas tendencias tiene que ver con los conductores más jóvenes, que prefieren pagar por uso del vehículo antes que por la propiedad. En ese sentido, según el propio Samuelsson, este producto es «muy atractivo para las nuevas generaciones», ya que ofrece la posibilidad de disfrutar de todos los beneficios de la marca pero sin necesidad de realizar una compra.
De hecho, la elección del XC40 para la puesta en marcha de esta iniciativa no es casual. Volvo ha preferido asociar este servicio a un vehículo pensado para el mercado particular en lugar de hacerlo con un modelo como el XC90, mucho más ligado al renting tradicional para directivos y empresas.
Una amenaza para Tesla
De manera paralela al desarrollo de coches «convencionales», Volvo ha tomado el ejemplo de Tesla para echar el resto en el campo de los vehículos eléctricos de altas prestaciones. Una apuesta que Hakan Samuelsson considera como una «buena idea».
Esta estrategia va tomando forma de la mano de la filial Polestar, que recibirá una inyección de 640 millones por parte de Geely para competir contra fabricantes como la propia Tesla. Eso sí, Samuelsson quiere desmarcarse de la estrategia de la firma norteamericana, que todavía no ha sido capaz de arrojar beneficios.
El primer modelo que hemos conocido de Polestar es el Polestar 1, un coupé híbrido enchufable de 600 CV de potencia y un par de nada más y nada menos que ¡1.000 Nm! La autonomía en modo eléctrico de este deportivo es de 150 kilómetros. Su lanzamiento comercial no tendrá lugar hasta 2019, pero en 2018 podríamos ver por las carreteras una opción más pequeña, el Polestar 2, que vendrá para competir directamente contra el Tesla Model 3.