Los beneficios que implica la instalación de una empresa en un país de los llamados ´paraísos fiscales´ pueden verse multados de forma millonaria en el caso de Fiat, que se habría establecido en Luxemburgo, aprovechándose de los menores gravámenes existentes en ese territorio. Esta determinación se ha tomado por parte de la Comisión Europea tras unas investigaciones que tuvieron lugar el año pasado después del caso ´Luxleaks´, que situó a Luxemburgo en el ojo del huracán al ayudar a las empresas a pagar menos impuestos.
Las averiguaciones principales han figurado entorno al marco fiscal pactado por Fiat con el país luxemburgués, que habría incluido subsidios escondidos bajo un acuerdo fraudulento con el objetivo de una reducción impositiva ligada a la instalación de la compañía allí. Esta práctica, totalmente contraria a la normativa continental, es conocida como ´Tax Ruling´.
Además, el escándalo también salpicaría a la empresa Starbucks, con una práctica similar a la de Fiat pero en Holanda, mientras que Amazon, McDonalds o Apple están siendo investigados. Hoy miércoles se espera un anuncio respecto a las sanciones por parte de la Comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, que podría establecer un precedente y aviso para otras corporaciones en cuanto a este tipo de prácticas.