Una de las modificaciones más llamativas realizadas por los diseñadores del centro LATAM de Fiat es la sustitución de la parrilla convencional del Bravo, con el logotipo de la marca, por una inspirada en el Fiat Mefistofele… un modelo que data del año 1908, midiendo 5,1 metros de longitud y ofreciendo una potencia de 320 CV gracias a su motor de 21.708 centímetros cúbicos. Y es que el Bravo XTreme se caracteriza por combinar lo clásico con lo más deportivo: El parachoques cambia por completo respecto al Bravo que conocemos -el trasero alberga un difusor y una doble salida de escape-, y se han añadido dos tiras de luces LED. Sus enormes llantas cromadas completan el aspecto diferenciador.
Su interior pierde una plaza, presentando una configuración 2+2, pero los pasajeros traseros disfrutarán de dos pantallas de televisión. El cuadro de instrumentos tiene dos colores: El velocímetro y los indicadores de combustible y temperatura se iluminan en blanco, mientras que el rojo queda para el cuentarrevoluciones.
Pero lo más radical del Fiat Bravo XTreme es su motor: El 1.4 T-Jet de gasolina pasa a contar con 253 CV a 6.600 rpm y 340 Nm en esta edición especial. Para lograr los mejores comportamiento y prestaciones -de las que todavía no tenemos ningún dato-, el chasis recibe unos muelles un 10 % más rígidos y amortiguadores específicos, mientras que la distancia al suelo ha sido reducida en 5 mm.
Tras su aparición en el Salón de Sao Paulo, se espera que el Bravo XTreme pueda verse en vivo en el SEMA Show 2012 -del 30 de octubre al 2 de noviembre en Las Vegas (Nevada, Estados Unidos)-.