Bien es cierto que el segmento de los anteriormente llamados minivolúmenes está muerto tras el apogeo de los SUV urbanos, pero aún hay dos marcas que pugnan en él. Tras la desaparición del Fiat 500L, son sólo el Opel Crossland y el Honda Jazz los que lo integran. Este último, nacido en 2001, conocido en otros mercados como Honda Fit y cuya cuarta generación fue lanzada en 2020, acaba de presentar una actualización que estará disponible en las próximas semanas.
Dicho restyling contempla tres áreas: diseño, motor y acabados. En lo relativo a lo primero, son nuevos los faros, la parrilla, los paragolpes, las llantas, los estribos de la versión Crosstar y la gama cromática de la carrocería, que sigue midiendo 4,04 metros de largo y que ahora recibe los nuevos tonos Urban Grey y Fjord Mistic Blue. Dentro, en un habitáculo que destaca por la amplitud de sus plazas traseras, hay nuevos tapizados y guarnecidos.
En el mercado europeo, el Jazz sólo se comercializa con una motorización híbrida, algo que seguirá siendo así tras este restyling. El sistema de impulsión del Jazz Hybrid se compone de un motor de gasolina, un motor eléctrico, un generador eléctrico y una pequeña batería. Las ruedas siempre son movidas por el motor eléctrico, mientras que la función del propulsor de gasolina es alimentar al generador eléctrico que, a su vez, suministra energía al motor eléctrico. La transmisión ha sido revisada en busca de un funcionamiento más agradable.
Por eso, los 109 CV de potencia del motor eléctrico, que tras este restyling son 122 CV, son los que están disponibles para el conductor. El propulsor de gasolina tiene 1.5 litros de cilindrada y 107 CV de potencia (antes 98 CV), pero no es un dato demasiado importante porque, como decíamos, el bloque térmico no está conectado a las ruedas. El consumo de combustible se cifra en 4,5 L/100 km (igual que antes), mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h no se ha anunciado, pero será sensiblemente mejor que la del modelo saliente, que es de 9,4 segundos.
Por último, el Honda Jazz recibe un nuevo acabado denominado Advance Sport y, que como su nombre sugiere, luce un aspecto deportivo. Aporta paragolpes específicos, parrilla, espejos, llantas y, en el interior, un volante de tres radios, tapicería sintética de ante y piel y pespuntes amarillos en los guarnecidos de las puertas. Además, Honda asegura que la respuesta del acelerador es algo más instantánea y que el motor térmico tiene el límite de revoluciones un poco más arriba.
A nivel de chasis, el Jazz Advance Sport se beneficia de una suspensión pasiva un poco más dura que la estándar, concretamente, con un 8% más de firmeza delante y un 20% detrás, que busca dinamizar un poco el comportamiento de un vehículo que destaca más por su confort de marcha.
Aún no hay precio definitivo para el nuevo Honda Jazz 2023 pero, teniendo en cuenta que el modelo que está a punto de ser descatalogado cuesta desde 23.650 euros, podemos esperar en el nuevo modelo un precio que ronde los 24.500 euros.