El Jaguar I-Pace es un SUV de 4,68 metros de largo, que monta dos motores eléctricos que, en conjunto, desarrollan 400 CV de potencia y 696 Nm de par. Según Jaguar, la autonomía homologada del I-Pace es de 470 km. Los 90 kWh de capacidad de la batería, compuesta por 432 celdas, le sitúan a la cabeza del sector en términos de autonomía -con el permiso del Tesla Model X P100D-. Los usuarios del I-PACE sólo necesitan 45 minutos para cargar el 80 % de la batería con una toma de carga rápida -100 kW-, mientras que con un enchufe corriente de 7 kW podrán obtener el mismo porcentaje de carga en 10 horas.
En términos de prestaciones, el I-PACE no tiene nada que envidiar a muchos deportivos, porque combina a la perfección la potencia de sus propulsores con un efectivo sistema de tracción integral, que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos. Estéticamente, llama la atención su aerodinámica línea exterior, con un coeficiente de resistencia al aire de sólo 0,29, que consigue, entre otros elementos, gracias a unas láminas activas en la parrilla que se abren o cierran en función de las necesidades de refrigeración.